El crecimiento se vio impulsado por un compromiso de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados de seguir drenando un superávit impulsado por el virus
Los precios del petróleo volvieron a subir este viernes y cerraron la semana en los niveles máximos desde el inicio de la pandemia de coronavirus.
En Londres, el barril de Brent del Mar del Norte para entrega en abril ganó US$ 0,50 (0,84%) desde el cierre del jueves, hasta US$ 59,34.
Durante la sesión, había subido a US$ 59,75, pero no pudo cruzar el umbral de US$ 60, indicó la agencia de noticias AFP.
En tanto, el barril estadounidense del WTI para marzo subió US$ 0,62 (1,10%), a US$ 56,85, tras alcanzar los US$ 57,09, el nivel más alto desde el 22 de enero de 2020.
Los precios del petróleo «siguen subiendo y el Brent se está acercando a la importante barra psicológica de 60 dólares» el barril, señaló Eugen Weinberg, analista del Commerzbank.
De esta manera, el petróleo marcó un nuevo récord en un año en Nueva York con continuas restricciones a la oferta de los productores que ayudaron a impulsar la fortaleza en todos lados, desde los mercados físicos hasta la curva de futuros.
La cantidad de embarcaciones que navegan hacia China saltó a un máximo de seis meses durante la jornada, lo que sugiere que el mayor importador del mundo podría estar volviendo al mercado del petróleo.
Mientras tanto, las existencias de crudo vinculadas a los futuros del petróleo en China cayeron a su nivel más bajo desde junio de 2020, según la empresa de análisis de datos OilX.
El crudo se vio impulsado esta semana por un compromiso de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados de seguir drenando un superávit impulsado por el virus.
Las expectativas de una recuperación económica mundial este año también están elevando las previsiones de una demanda de petróleo más fuerte, a pesar de que las medidas de bloqueo están restringiendo la movilidad mientras tanto.