El cantante de cumbia Rubén Darío «El Pepo» Castiñeiras fue trasladado este martes desde el hospital de la localidad bonaerense de Dolores a la comisaría de Chascomús. El músico está acusado de «homicidio culposo» por la muerte de dos personas, tras el vuelco de la camioneta que conducía por la ruta 63.
En medio de un fuerte operativo de seguridad, «El Pepo», quien días atrás había sido dado de alta, fue sacado en una silla de ruedas del hospital alrededor de las 11:30 para ser llevado a la vecina localidad de Chascomús donde quedará detenido.
Al llegar a la seccional policial, cerca de las 13:00, el músico hizo unas breves declaraciones a la prensa en las que dijo sentirse «muy triste» y expresó sus condolencias a las familias de los fallecidos en el siniestro.
Mientras se aguardan para este jueves el resultado de los análisis toxicológicos que se le realizaron, uno de los abogados del artista, Walter Comarce, confirmó que «El Pepo» reconoció que tomó «algo de acohol» antes del accidente ocurrido el 20 de julio pasado en el que además de las dos muertes ocurridas, el cantante y una corista resultaron heridos.
El cantante, que cuenta con antecedentes penales, protagonizó un trágico hecho a la madrugada de ese sábado cuando volcó la camioneta Honda CRV blanca que manejaba en la Ruta Provincial 63, a la altura del partido de Dolores.
A causa del siniestro murieron el representante Ignacio Abosaleh y el trompetista Nicolás Carabajal, mientras que la corista Romina Cándias sufrió la fractura de una pierna en el vuelco y «El Pepo» terminó con heridas superficiales en el rostro.
Castiñeiras está acusado de presunto «homicidio culposo doblemente agravado por la conducción imprudente, negligente y antirreglamentaria», así como también por «lesiones culposas doblemente agravadas».