El campeón del mundo se sumará a un plantel que tiene la misión de salvarse del descenso y dar el golpe en la liga de Italia
Alejandro ‘Papu’ Gómez, campeón del mundo con la Selección argentina, llegó este viernes a Milán para cerrar su fichaje por el Monza, equipo de Serie A, al que llega como agente libre y le puso fin a la posibilidad del retiro como profesional.
El centrocampista argentino, sin equipo desde que terminara su contrato con el Sevilla la pasada campaña, analizó la posibilidad de colgar los botines y estudiar algunas ofertas de Arabia Saudita y Qatar, pero finalmente el ex atacante de San Lorenzo y Arsenal de Sarandí eligió un nuevo desafío para la etapa final de su carrera: vuelve a Italia, donde hace poco más de tres años brilló como pieza fundamental del Atalanta del italiano Gian Piero Gasperini.
El ‘Papu’, campeón del mundo con Argentina, acudirá ahora a la provincia de Monza y Brianza para someterse a exámenes médicos y firmar su nuevo contrato con el equipo que el magnate Silvio Berlusconi, fallecido el pasado mes de junio, llevó a la máxima categoría del fútbol italiano por primera vez en su historia en 2022.
Fundado en 1912, el Monza solía transitar en las divisiones menores del fútbol italiano, lejos de la Serie A. Sin embargo, en los últimos años, el club tuvo un crecimiento vertiginoso crecimiento, debido a la inversión del ex primer ministro italiano y antiguo propietario del AC Milan. La llegada del ex funcionario en 2018 marcó un punto de inflexión y desde entonces, el club ascendió de manera constante en la jerarquía del fútbol italiano hasta llegar a la máxima categoría.
En la presente temporada, la misión es evitar el descenso para afianzar el proyecto a largo plazo y buscar en un futuro cercano la clasificación para alguna competición europea.
Figuras de la talla de Kevin-Prince Boateng y Mario Balotelli ya dejaron su huella en el Stadio Brianteo, y ahora será el turno para el ”Papu” Gómez, quien se sumará después de su paso por el Sevilla y con el brillo que le da la medalla de campeón del mundo que obtuvo en Qatar.
La llegada del argentino se aceleró tras la grave lesión del italiano Gianluca Caprari, que se rompió el ligamento cruzado anterior.
Gómez a lo largo de su trayectoria afrontó 647 partidos profesionales, en los que convirtió 117 goles y brindó 114 asistencias en todos los clubes en que jugó, mientras que en el seleccionado, siendo campeón de américa y mundial, reúne 17 encuentros y tres goles. Aunque sus números son buenos, viene de una discreta temporada en el Sevilla en la que jugó 19 partidos y anotó 1 solo gol.