El sumo pontífice tuvo este viernes la visita de la pareja del flamante presidente argentino, Alberto Fernández, en el Vaticano
El sumo pontífice tuvo este viernes la visita de la pareja del flamante presidente argentino, Alberto Fernández, en el Vaticano
El papa Francisco inauguró hoy la nueva sede de la fundación pontificia Scholas Occurrentes en el Vaticano, en un acto que contó con la presencia de la pareja del presidente Alberto Fernández, Fabiola Yáñez, y otras cuatro primeras damas latinoamericanas a las que les reveló su sueño de «una América Latina unida».
El pontífice bendijo y descubrió una placa en el ingreso de la sede que la fundación pontificia tiene en el barrio Trastevere de Roma acompañado por Yañez y las primeras damas de Belice, Brasil, Colombia y Paraguay, en el mismo día en que celebra el 50 aniversario de su ordenación sacerdotal. Como anfitriones, estuvieron los dos directores mundiales de Scholas, los argentinos José María del Corral y Enrique Palmeyro, quienes trabajan con Jorge Bergoglio hace más de 20 años.
«Yo todavía sueño con una América Latina unida y las mujeres son las únicas capaces de hacerlo», les dijo el pontífice a Yáñez y el resto de las primeras damas durante un encuentro privado de cerca de 20 minutos, en el que también hablaron de los planes de Scholas en cada uno de los países. «Estás estrenando el cargo», le dijo con una sonrisa Francisco a la primera dama argentina, al saludarlas una a una.
En ese marco, además, dialogaron sobre la «Reconstrucción del Pacto Educativo Global», en referencia al mega evento sobre educación que se hará en Vaticano el 14 de mayo, convocado por Scholas. En la reunión, Yáñez le obsequió al Papa el cáliz usado en la misa del domingo 8 de diciembre en Luján, de la que participó el presidente Fernández y su antecesor, Mauricio Macri.
La primera dama de Colombia, María Juliana Ruiz, le entregó a Bergoglio una carta y un pantalón usado por el ex arquero colombiano de San Lorenzo, Efraín «El Caimán» Sánchez, de 93 años.
A primera hora, Yáñez y las otras primeras damas participaron de una actividad con 20 jóvenes de Scholas, en la que pintaron un mural que luego estuvo en el salón central de la nueva sede de la fundación, que ocupa el tercer piso del primer cuerpo del palacio San Calisto, un edificio extraterritorial del Vaticano.
Durante el acto, Francisco resaltó que Scholas, creada en 2013 en base a las experiencias Escuela de Vecinos y Escuelas Hermanas que había impulsado como arzobispo porteño, motiva a los jóvenes a «expresar libertad, no tener miedo y a desinhibirse».
«Es la capacidad de hacer salir lo que uno tiene dentro. Cuando lo hacés en grupo el grupo te va conteniendo y ayudando, y juntos van haciendo camino e historia. La capacidad de desinhibición que vi que se crea en los chicos de Scholas es saludable, que no haya nada que no te permita expresarse. Y eso tiene poesía», dijo Bergoglio.
«Lo que Scholas gatilla en cada uno es poesía, y eso no quiere decir alienarse en cosas que están volando por arriba, sino que significa creatividad. Y el hombre y la mujer son creativos o permanecen infantes, no crecen. Y eso es lo que veo en los chicos, que han crecido. Y una creatividad acompañada por símbolos, historias. Scholas no hace proselitismo, crea libertad, porque apuesta a eso que cada uno tiene en su corazón, que es la capacidad de crecer y hacer su futuro», resaltó.
Durante el encuentro, Francisco inauguró también por videoconferencia la sede que Scholas abrirá en Los Ángeles, Estados Unidos, que se convirtió en la décimocuarta oficina de la fundación en el mundo.
Entre las casi 100 personas que participaron del evento, estuvieron también el presidente del club Milan de Italia, Paolo Scaroni; el científico Facundo Manes y el empresario Eduardo Eurnekian, a quien el Papa le obsequió un violín autografiado como muestra de agradecimiento por su apoyo a Scholas.
Al final, las cinco primeras damas y los invitados le cantaron al pontífice el «feliz cumpleaños»; junto a una torta con el número 50, en homenaje a los años que cumplió como sacerdote.