Las familias están recibiendo instrucciones sobre los pasos a seguir para acceder a la libreta digital. Los padres o tutores deberán contar con un usuario de ID Ciudadana y completar y firmar el formulario de adhesión de familiares.
La tradicional práctica de que los padres reciban la libreta de calificaciones durante el acto escolar está siendo reemplazada por una modalidad más ágil y accesible: la Libreta Digital. Este cambio implica un giro hacia la digitalización de la información académica, permitiendo que los padres puedan consultar las calificaciones de sus hijos con solo un clic en sus dispositivos electrónicos.
El Ministerio de Educación de la provincia de Santa Fe está llevando a cabo capacitaciones para implementar la Libreta Digital en las escuelas primarias este año. El objetivo es que para el cierre del primer período de calificaciones, programado para el 8 de mayo, la mayoría de los adultos responsables de los alumnos estén incorporados al sistema Mi Escuela, a través del cual podrán acceder digitalmente a la información académica de sus hijos.
Las familias están recibiendo instrucciones sobre los pasos a seguir para acceder a la libreta digital. Los padres o tutores deberán contar con un usuario de ID Ciudadana y completar y firmar el formulario de adhesión de familiares.
Ana Bacolla, subsecretaria de Innovación e Integración Digital, destacó que la implementación de la libreta digital en el nivel primario es una extensión del proyecto que ya se encontraba en uso en el nivel secundario. La digitalización pretende abarcar todo el sistema de educación obligatoria, que incluye a 374,000 alumnos en primaria y 249,600 en secundaria.
Durante este año, la libreta digital coexistirá con la versión en papel, especialmente para escuelas rurales sin acceso a Internet o para familias que no puedan acceder a dispositivos electrónicos. Sin embargo, se estima que más del 90% de las escuelas primarias podrán utilizar la libreta digital.
Bacolla resaltó que la libreta digital no solo elimina la necesidad de imprimir en papel, sino que también permite tener digitalizada la trayectoria educativa de los alumnos. Esta digitalización facilita el diseño de políticas educativas y la integración de datos sobre la trayectoria educativa de cada individuo, lo que supone un beneficio significativo para la movilidad entre escuelas y otros trámites relacionados.