El buque, que ha estado operativo durante más de cuatro décadas, había sido enviado hace pocos días a aguas internacionales para participar en unas maniobras de entrenamiento
En el Golfo de Omán sufrió un naufragio el mayor barco de la Armada de Irán. Se ha hundido tras sufrir un incendio a bordo el lunes frente a las costas de la ciudad de Jask,, tal y como han confirmado las autoridades del país centroasiático.
En un comunicado de la armada indican que el ‘Jark’, sufrió un incendio por causas por ahora no determinadas, los esfuerzos por extinguirlo hayan tenido éxito y la tripulación fue evacuada y trasladada durante las tareas de lucha contra las llamas, que finalmente han sido infructuosas, tal y como ha recogido la agencia iraní de noticias Mehr.
La Armada ha destacado que el barco, que ha estado operativo durante más de cuatro décadas, había sido enviado hace pocos días a aguas internacionales para participar en unas maniobras de entrenamiento.
El fuego comenzó en “uno de los sistemas” del navío, dice el texto sin dar más detalles.
Los servicios de emergencia lucharon durante “20 horas” después de que la tripulación evacuara el barco, pero “vista la propagación del incendio, la misión de rescate del ‘Kharg’ fracasó y el navío se hundió cerca de Jask”, dijo la marina.
El régimen iraní anunció hace algunos días que su proyecto de oleoducto con destino a Jask había terminado y que el petróleo había podido transportarse hasta el puerto.
Para Irán, exportar crudo vía Jask significa ganar varios días de navegación, con respecto al puerto de Kharg, en el Golfo, y también evitar el estrecho de Ormuz, centro de importantes tensiones entre Irán y Estados Unidos, cuyos navíos de guerra están presentes en la región.
Debido a las sanciones estadounidenses contra Irán, instauradas por el gobierno del ex presidente estadounidense Donald Trump para menguar las exportaciones de la República islámica, Teherán es muy discreto sobre sus envíos de petróleo, destinados a los pocos clientes que aún osan comprárselo.