Julián Molina, uno de los máximos referentes del atletismo argentino, elabora mascarillas junto a su novia. "Fue una iniciativa de un grupo de vecinos del edificio donde vivimos y nos sumamos a la propuesta", dijo
El atleta Julián Molina consideró que aporta su «granito de arena elaborando mascarillas y barbijos para hospitales y policías, ayudando a la comunidad» de Rosario, al aprovechar su tiempo libre.
«Ya que teníamos tanto tiempo libre, decidimos -con su novia Martina Aguirre- darle una mano a aquellos que se están arriesgando por nosotros cada día que pasa, aportando nuestro granito de arena», refirió el entrerriano, doble campeón nacional de maratón.
«Tenemos un grupo junto con vecinos del edificio en el que vivimos, en Rosario, donde pusieron la propuesta de hacer barbijos y mascarillas a la que nos sumamos apoyando la iniciativa de la Fundación La Usina», explicó el atleta de 27 años, para la revista ‘Más Aire’.
Esa fundación, sin fines de lucro, lleva a cabo la donación de los que colaboran en la fabricación de los citados elementos para distribuir a distintos hospitales, centros de salud, policías y bomberos de Rosario.
«Darle una mano a aquellos que se están arriesgando por nosotros cada día que pasa es una forma de ayudarlos», expuso Molina.