Otra empresa, en este caso un laboratorio, se sumó a la lista de empresas en dificultades financieras que solicitaron un proceso preventivo de crisis (PPC), la etapa previa a despidos o suspensiones de personal. Se trata de Elea, que afronta un escenario de fuerte caída de ventas y endeudamiento en dólares.
La decisión se suma a unos 30 empresas que ya presentaron procedimientos preventivos en lo que va del año.
Si bien no fue confirmado desde la empresa, en el mercado farmacéutico se estima que la compañía planea despedir al 10 por ciento del personal, unas 120 personas. La decisión refleja el fuerte impacto de la recesión aún sobre empresas que hasta hace apenas dos años venían en expansión.
En 2017, Elea había comprado la farmacéutica Phoenix, lo que habría terminado provocando una sobredimensión de personal.
En el mercado sostienen que, tras esa operación, la fuerza de ventas quedó sobredimensionada en comparación con otros laboratorios del mismo tamaño. Tras la compra de Phoenix, la cantidad de visitadores alcanzó los 370, un nivel que está por encima de la media del mercado para compañía de porte similares.
Al justificar el pedido de Procedimiento Preventivo ante el Ministerio de Producción y Trabajo, Elea demostró que sufrió tres años de balances negativos.
Por ahora, el laboratorio dijo que tomó la decisión de afectar hasta 5% de la plantilla con sus despidos, aunque dependerá de la evolución de sus ventas.
Elea tiene plantas de producción orientadas a cardiología, oncología, neurociencias y venta libre. Entre sus marcas más conocidas se encuentran Nopucid y Caladryl, que habría sufrido fuertes caídas en ventas.