El Gobierno demora el envío de la adenda al Consenso Fiscal de 2017 porque no cuenta todavía con el apoyo de algunos gobernadores clave y ello complica la votación del Senado, que se ve ajustada.
Hasta el momento, ese proyecto de adecuación del Consenso Fiscal, que más allá de permitir a los gobernadores aumentar su recaudación vía impuestos sirve para cristalizar su apoyo al Presupuesto 2019 (ambos están relacionados entre sí) fue firmado por 13 mandatarios provinciales.
Si se proyecta ese nivel de apoyo en el hemiciclo del Senado, el oficialismo cuenta con 37 votos, número que alcanza para tener quórum y dar inicio a la sesión pero que es ajustado para ir a votar.
La adenda fue firmada por los gobernadores de Salta, Juan Manuel Urtubey; de Córdoba, Juan Schiaretti; de Misiones, Hugo Passalacqua; de San Juan, Sergio Uñac; de Entre Ríos, Gustavo Bordet, y de Chaco, Domingo Peppo.
Con ese respaldo, a los 25 senadores propios que tiene el Gobierno, se sumarían los salteños Rodolfo Urtubey (Justicialista) Juan Carlos Romero (Federal) y Cristina Fiore (PARES); el cordobés Carlos Caserio (Justicialista) y los sanjuaninos Rubén Uñac y Cristina López Valverde (Justicialista).
Los misioneros Maurice Closs y Magdalena Solari (Renovador); el chaqueño Eduardo Aguilar (Justicialista); los entrerrianos Pedro Guastavino y Sigrid Kunath (Justicialista) y el rionegrino Miguel Pichetto, jefe del Bloque Justicialista, redondean los 37 votos.
Si bien no todos esos senadores responden de manera directa al gobernador, varios de ellos suelen acompañar (aún con críticas) los proyectos del Gobierno cuando el Estado provincial muestra su respaldo, tal es el caso de Caserio, Fiore, Romero y Aguilar.
La adenda también fue firmada ya por el rionegrino Alberto Weretilneck; el correntino Gustavo Valdés; el porteño Horacio Rodríguez Larreta; el neuquino Omar Gutiérrez; la bonaerense María Eugenia Vidal; el jujeño Gerardo Morales y el mendocino Alfredo Cornejo.
Sin embargo, para el caso tienen un peso muy relativo en el Senado: Larreta, Vidal, Morales y Cornejo son oficialistas y sus senadores ya cuentan para Cambiemos, no suman, mientras que Valdés y Weretilneck no tienen legisladores que les respondan directamente en la Cámara alta.
Otro caso particular es el de Gutiérrez, que comparte la pertenencia al Movimiento Popular Neuquino (MPN) con los senadores Guillermo Pereyra y Lucila Crexell, pero ellos suelen diferenciarse: el primero ya expresó críticas a la la eliminación de las exenciones del impuesto a las ganancias que contempla la adenda.
El Gobierno necesita para asegurarse la aprobación de los gobernadores de Tucumán, Juan Manzur, de Chubut, Mario Arcioni, y de Santiago del Estero, Gerardo Zamora, quienes todavía no firmaron la adenda.
En caso de adherir, el oficialismo podría contar al menos con cuatro o cinco votos más de los senadores de esas provincias.
En tanto, dan por hecho que el pampeano Carlos Verna y el puntano Alberto Rodríguez Saá no firmarán la adenda, no solo por ser los más duros con la Casa Rosada sino porque no suscribieron al Consenso Fiscal que se firmó el año pasado.
Otro tema será si, a pesar de ello, los senadores pampeanos justicialista Daniel Lovera y Norma Durango votan a favor de la adenda y si los diputados aprueban el Presupuesto 2019.
El santafesino Miguel Lifschitz, el formoseño Gildo Insfrán, la santacruceña Alicia Kirchner, la catamarqueña Lucía Corpacci y la fueguina Rosana Bertone tampoco firmaron y algunos generan más dudas que otros en el oficialismo.
Tanto Insfrán, como Bertone y Corpacci tienen senadores en el Bloque Justicialista de Pichetto y esos votos ayudarían al oficialismo a blindarse ante cualquier tipo de eventualidad que afecte la construcción de la mayoría necesaria para aprobar la adenda.
La aprobación de este proyecto está atada a la del Presupuesto 2019 en la Cámara de Diputados: el respaldo de los gobernadores peronistas al primero reflejará su apoyo al segundo.