El Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA) suspendió este lunes por 30 días al gerente de Relaciones Internacionales, Bernardo Bergeret, luego de que se lo acusara de autorizar compras sin licitación por más de 6 millones de pesos. El implicado se había negado a renunciar.
Además, las autoridades del organismo dejaron sin efecto la designación de Bergeret como gerente y se instruyó «al responsable de la Unidad de Transparencia Institucional que ponga en conocimiento a la Oficina Anticorrupción de todo lo actuado». El presidente del INCAA, Ralph Haiek, resolvió suspender «preventivamente» por 30 días a Bergeret hasta que se aclare su situación, mientras se desarrolla un sumario interno.
«Yo no me voy, voy a pedir que me hagan el sumario. Voy a seguir en el INCAA hasta que este sumario se termine. No me voy porque quiero salir por la puerta grande», advirtió Bergeret horas antes de su suspensión. El funcionario fue acusado a través de una denuncia anónima ante las autoridades del organismo de haber realizado gastos de imprenta por un total de 6.487.600 pesos entre enero y abril de este año.
«Recibimos la denuncia anónima y en casi 10 días se había investigado, recolectado información y separado preventivamente a todas las personas. Es importante que se entienda que en el INCAA no se puede robar», subrayó el ministro de Cultura, Pablo Avelluto, en declaraciones a radio La Red. Según sostuvo el funcionario nacional, Bergeret «aparece como responsable al haber aprobado estas compras, que efectivamente le costaron al Estado mucho más que los servicios que se contrató». «A partir de la denuncia anónima se vio la consistencia que tenía y de inmediato se denunció todo en la Oficina Anticorrupción (OA), que evalúa y es quien finalmente presenta la denuncia» judicial, explicó Avelluto y afirmó que en paralelo internamente se abrió un sumario.
Por su parte, Bergeret aseguró: «Avelluto podrá decir lo que quiera, pero yo sigo siendo parte del INCAA. Voy a pertenecer al INCAA por lo menos hasta el momento que se termine el sumario». «Si nos mantenemos en esa denuncia anónima que hay y en las facturas que están poniendo ninguna de esas facturas tiene mi firma, en algunas figura el sello mío y en otras figura como puesto por impresora a mi nombre», señaló el gerente del organismo.
En declaraciones a radio La Red, negó que se encuentre «atrincherado» y sostuvo: «Yo estoy en el INCAA hace mucho tiempo, trabajé muchos años siendo director de compañías discográficas. Llegué al INCAA porque querían hacer un departamento de marketing, y luego como tenía experiencia internacional me dediqué a eso». «Esto se debe aclarar ante la Oficina Anticorrupción. No dudo que sea grave, yo estoy a disposición de la Justicia, la Oficina Anti Corrupción, y del Incaa hasta que se termine el sumario», dijo Bergeret, quien antes de llegar al organismo fue productor musical en distintas compañías.
En la resolución se detalló que la denuncia anónima comenzó a circular el 11 de mayo último difundida por la casilla de mail «incaacorrupto@gmx.es» y llegó manos de las autoridades del INCAA el 18 de mayo. «Frente a la gravedad de los hechos denunciados, se dio inmediata intervención a la Unidad de Transparencia Institucional, a los fines de que analizara la información disponible y sugiriera un curso de acción. Dicha Unidad elevó un informe preliminar, en el que se destaca la gravedad de los hechos denunciados, así como la verosimilitud de algunos de los dichos vertidos por el denunciante, en cuanto a la comisión de irregularidades en la gestión de esas adquisiciones», expresó el instituto. Además, señaló que «se habrían realizado gran cantidad de contrataciones directas con el mismo objeto, originadas todas en el mismo sector requirente, en un breve período de tiempo y todas por montos inferiores a los 500.000 pesos, en las que se habría eludido la celebración de procesos licitatorios y sustrayéndolas del control de las autoridades superiores».