La muerte ocurrió este viernes como consecuencia de complicaciones en una afección cardíaca que lo aquejaba hace tiempo
El folclorista, cantor y compositor santiagueño Juan Carlos Carabajal, autor de canciones como “Adiós que te vaya bien”, “La mesa”, “Corazón verdugo”, “Las coplas de la vida” y muchas otras que creó para sí o para otros grandes referentes del género, falleció ayer a los 79 años, como consecuencia de complicaciones en una afección cardíaca que lo aquejaba hacía tiempo.
“’Recogeré mis coplas del árbol de la vida, y estarán bien maduras cerca de mi partida’ (‘Las coplas de la vida’). Feliz viaje, viejito querido. Gracias por la vida y por el ejemplo. Por el amor y la música. Por amar tanto a mi madre. Por mis hermanos. Me queda todo de vos. Te envidio y admiro haber sabido vivir a pleno, aprovechando cada minuto la vida”, publicó en sus redes sociales su hijo Lucas Carabajal, quien lo acompañó durante años en sus presentaciones con el grupo El Rejunte.
Justamente, Lucas y Martín “Zurdo” López, otro músico que participó de El Rejunte, homenajearon en vida al folclorista la semana pasada en el Festival del Canasto de Termas de Río Hondo, con sus grupos actuales, Delirios de grandeza y Descendencia.
Nacido el 17 de julio de 1943 en Quimilí, a 200 kilómetros de la ciudad de Santiago del Estero, Juan Carlos fue también periodista, con una reconocida trayectoria en radio, diarios y revistas, y docente rural.
Durante su carrera musical se asoció a importantes melodistas como Miguel Simón, Onofre Paz, Horacio Banegas, Peteco, Kaly, Cuti y Carlso Carabajal, Néstor Garnica o Elpidio Herrera. De su pluma nacieron conocidos temas que han sido interpretados por figuras como Peteco Carabajal, Los Carabajal, Alfredo Ábalos, Suna Rocha, Los Nocheros, Chaqueño Palavecino, Los Manseros Santiagueños o Los Tekis.
Uno de los hitos más conocidos en su trayectoria fue la gira que hizo en 2001 por Japón.
Grabó tres discos con El Rejunte, y otros tres como solista, que recopilaban su giras por el país tituladas “De pueblo en pueblo”. Recorrió más de un centenar de ciudades y siempre invitaba a artistas locales a formar parte del show.
De sus experiencias y anécdotas de esa experiencia como juglar nació el libro “Juan de los caminos”, al que le seguirían otros dedicados a su Quimilí natal y a la familia Carabajal, símbolo del folclore santiagueño.
Los restos de Carabajal eran velados hoy en una casa de servicios fúnebres ubicada en La Plata 162 de la capital santiagueña, informaron sus allegados a la prensa provincial.