Este lunes, empezó la Cumbre de Acción Climática que se celebra en la sede de Naciones Unidas, en Nueva York. Durante su discurso, la joven activista sueca Greta Thunberg, líder del movimiento juvenil contra la crisis climática, dijo a los jefes de Estado que los jóvenes van a empezar el cambio «les guste o no».
Con su feroz discurso, que pronunció con lágrimas en los ojos, la joven Thunberg les recordó la indignación de la juventud mundial por su inacción y les acusó de hipocresía. «Yo no debería estar aquí, yo debería estar en la escuela, del otro lado del océano», dijo la joven que se ha tomado un año sabático para impulsar la causa climática.
«Han robado mis sueños y mi niñez con sus palabras vacías, y sin embargo soy una de las más suertudas. La gente está sufriendo, la gente está muriendo, ecosistemas enteros están colapsando», afirmó. «Estamos en el comienzo de una extinción masiva, y de lo único que ustedes pueden hablar es de dinero (…) ¿Cómo se atreven?», preguntó.
«Si realmente entendieran la situación no estarían sin hacer nada. Nos están fallando. Los ojos de las futuras generaciones están sobre ustedes. Nunca los perdonaremos. ¿Cómo se atreven a pretender que esto se puede resolver con los negocios como de costumbre? El mundo se está despertando»
«Aquí y ahora es donde damos un paso adelante, el cambio viene, les guste o no», dijo Greta. «Se están muriendo los ecosistemas, estamos a las puertas de una extinción masiva», agregó la joven activista de 16 años, quien dijo estar «triste y enojada».
Greta, que ha inspirado a millones de jóvenes a lo largo y ancho del mundo, insistió en que desde hace más de treinta años «los datos científicos son clarísimos» sobre la crisis climática y sus consecuencias devastadoras.
«Cómo se atreven a mirar para otro lado, a venir aquí a decir que están haciendo suficiente. Dicen que nos escuchan, que entienden la urgencia pero si realmente entendieran la situación no estarían sin hacer nada», dijo.
Greta aseguró que la propuesta de reducir las emisiones contaminantes a la mitad para evitar que la temperatura del planeta aumente por encima de 1,5 ºC, no es lo suficientemente ambiciosa.