Según un relevamiento del Centro de Estudios Scalabrini Ortiz, los combustibles aumentaron hasta septiembre un 24%, dos puntos por encima de la inflación. En octubre, la tendencia se acentúa
El aumento del precio de los combustibles sigue golpeando el bolsillo de los santafesinos. De acuerdo con el último relevamiento del Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz (Ceso), entre enero y septiembre de 2025 la nafta subió un 24%, superando por dos puntos la inflación del mismo período.
Solo en septiembre se registraron al menos tres incrementos, lo que dejó un alza acumulada cercana al 5% mensual. En ese contexto, llenar un tanque de 50 litros de nafta súper costó $76.530, es decir $13.700 más que a comienzos de año.
El panorama también se complica para el transporte de carga. En el caso del gasoil común, un camionero santafesino debió desembolsar $56.035 para llenar el tanque, $11.515 más que en enero, lo que representa un aumento del 26%.
El informe advierte además que en octubre las subas continúan, lo que amplía la brecha entre la evolución de los precios de los combustibles y la inflación general.
Alejo Murat, integrante del Centro de Estudios Scalabrini Ortiz (CESO), en diálogo con LT3, afirmó: “Llenar el tanque hoy cuesta cada vez más. Solo en septiembre, un tanque de 50 litros de nafta súper costaba alrededor de 76 mil pesos, es decir 13.700 pesos más que en enero”.
El relevamiento, que analiza la evolución de precios en Santa Fe, muestra que el incremento en los combustibles se acentuó en octubre, lo que amplía aún más la brecha respecto del índice inflacionario.
Caída en las ventas y menos control sobre los precios
El informe del CESO también advierte una caída en las ventas de nafta y gasoil, en un contexto donde el Gobierno nacional eliminó la obligación de las estaciones de servicio de informar los aumentos de precios. Esta decisión genera una mayor incertidumbre y refuerza la necesidad de seguir de cerca informes independientes como el del centro de estudios.
“Básicamente lo que más nos llamó la atención fue que los combustibles suben más rápido que la inflación. Hoy, llenar el tanque se volvió un gasto que pesa más en el bolsillo de las familias y los trabajadores”, remarcó Murat.