Al cuestionar la disposición que permite computar como encajes a los títulos públicos, la autoridad monetaria destacó que su ex presidente tomó una determinación similar en 2018
Las nuevas medidas del Banco Central que permiten computar como encajes a los títulos públicos gatilló hoy una fuerte polémica entre la autoridad monetaria y un ex presidente macrista de la entidad.
El Central cruzó a Guido Sandleris, quien fue presidente de la autoridad monetaria durante el Gobierno de Cambiemos, al argumentar que en 2018 se tomó una determinación similar para los encajes, que además no era «voluntaria» como sucede en la actualidad.
El BCRA decidió en su reunión de directorio de esta semana habilitar la posibilidad de que las entidades financieras tengan la opción de integrar la porción de sus encajes bajo la forma de Letras de Liquidez del BCRA (Leliq) a bonos del Tesoro.
La medida fue cuestionada por Sandleris, ex funcionario de la administración de Mauricio Macri, al advertir que «pone en peligro uno de los pocos consensos importantes que se habían alcanzado en lo que hace a política económica: la regulación prudencial del sistema bancario».
Según pronosticó, «la próxima crisis de deuda traerá de la mano una crisis bancaria», mientras indicó: «Romper con el consenso alcanzado en regulación prudencial del sistema bancario, para reducir en el margen el costo de financiamiento del gobierno es una mala señal».
En ese escenario, desde el organismo que conduce Miguel Pesce refutaron la consideración de Sandleris, al recordar que en junio de 2018, cuando era viceministro y representante del Ministerio de Economía en el Banco Central, se aprobó la Comunicación A6526, cuyo punto 3 permite integrar los efectivos mínimos con bonos BOTE, y en el punto 4 se los excluye del fraccionamiento sector público.
Fuentes del BCRA destacaron a la agencia NA que la norma dada a conocer el jueves es «voluntaria», porque las entidades financieras tienen la opción de elegir entre títulos o Leliq.
Remarcaron que en 2018 la medida puesta en marcha «no tenía nada de voluntaria en la práctica».
«La opción era BOTE o cuenta corriente a tasa cero», señalaron y subrayaron que actualmente también está «la opción de recompra automática de esos títulos, si la entidad necesita liquidez».
Al dar a conocer la medida tomada en la reunión de directorio, el Central aseguró que se pondrá en marcha para
«contribuir al desarrollo del mercado de capitales doméstico».
Además, mediante esta alternativa, las entidades podrán evitar el impuesto a las Leliq aplicado por la Ciudad de Buenos Aires, luego de la quita de Coparticipación y fortalecer así su rentabilidad.