El 66% de las personas trans de la provincia de Jujuy declaró haber sufrido violencia y hechos de discriminación por parte de la Policía y el 56% que fue detenida sin la intervención de un juez.
En el ámbito laboral, el trabajo sexual del sector se ubica en el 28,2%, ocupación a la que se dedican para autosostenerse.
En el educativo el 64% indicó que sufrió discriminación y violencia, y en el 74,3% de los casos ocasionados por compañeros.
En tanto que el 54,3% culpó de estos hechos a maestros y profesores que cuentan con una formación académica y pedagógica.
Estos datos surgen del Estudio Demográfico y Socioeconómico de las Personas Trans Femeninas de la Provincia de Jujuy que viene trabajando la Dirección Provincial de Estadística y Censos junto a la Fundación «Damas de Hierro», del que se hace eco el diario El Tribuno de Jujuy.
Los mismos se dieron a conocer este martes en conferencia de prensa llevada a cabo en la Dirección Provincial de Estadísticas y Censos de Jujuy (Dipec).
Los datos oficiales de las 163 personas que forman parte de este colectivo fueron obtenidos entre noviembre de 2017 y febrero de este año.
El censo indagó sobre la situación socioeconómica, demográfica, poblacional, educativa, de la salud y asistencia legal del sector.
Al respecto, la titular de la Dipec, Ana Juárez Orieta, sostuvo que realizarán el censo en tres períodos consecutivos, dado que es una población que no se puede proyectar.
«Vamos a hacer durante 3 años esta muestra para después espaciarlo como corresponde en un operativo censal que es cada 5 años», detalló.
En cuanto a los datos estadísticos, el censo arrojó que el 76,1% de la población trans trabaja para subsistir. En el rubro obrero o como empleados en relación de dependencia está el 33,9%, en tanto que como trabajadora sexual o prostitución el 28,2%, en servicios sociales el 4% y labor a cuenta propia el 33,9%, (costureras, peluqueras, manicura y actrices, entre otras).
Por otro lado, el 67,5% de personas trans declaró haber ejercido en alguna oportunidad la prostitución para sobrevivir.
La base de datos publicados por la Dipec da cuenta también sobre la expectativa de vida de las trans jujeñas y señala que es de 37 años, contra 74 años para la mujer y 73 años para el hombre, según la media nacional.
«Después de los 39 años encontramos una muy baja cantidad, sólo el 22% es mayor», destacó la funcionaria.
En cuanto a la edad en la que expresaron su identidad las personas trans, el censo arrojó que el 73% lo hizo antes de los 17 años, el 32,5% hasta los 12 años y el 40,5% entre los 13 y 17 años.
En este escenario, Orieta hizo mención a que la Convención Internacional de los Derechos del Niño establece que deben ser considerados por los estados como niño hasta los 17 años, de manera tal que el 73% de este grupo de alta vulnerabilidad se expresa siendo todavía niño.
En tanto que la expresión más allá de los 18 años baja en cantidad y se ubica en un 38%.
La experiencia de discriminación por el hecho de autopercibirse como femeninas, el 58,3% fue por parte de los parientes, el 20,9% por su expareja o pareja, el 31,9% por amigos y el 53,4% por parte de los vecinos.
De esta manera, el 64% de la población tuvo que ocultar su identidad en el ámbito familiar.
Para conocer cómo se comporta la sociedad jujeña, el 85,3% ha sufrido discriminación o violencia en la vía pública. En tanto que el 39,9 % sufrió discriminación a la hora de hacer reclamos en oficinas públicas o trámites y el 60% indicó que no pasó por dicha situación.
Desde el organismo de estadísticas provincial brindaron datos de las condiciones sociosanitarias de la comunidad, dando a conocer que el 37% ha sufrido violencia y discriminación. De ese porcentaje, un 68,9% por parte de enfermeros, un 65,6% de médicos y un 63,9% del personal administrativo.
«Tenemos que tener en cuenta que el 87% se atiende en la salud pública, porque no tienen obra social, y de ese colectivo que debe ir a la salud pública, el 50,8% por la discriminación y la violencia que sufre en los ámbitos sanitarios lo tuvo que abandonar», explicó la directora.
El 42,6% tuvo que dejar tratamientos médicos, el 41% dejó la escuela y el 33,2% tuvo que dejar de vivir con su familia por la discriminación y violencia que sufren.
Sucede también que a las personas trans se les dificulta la búsqueda laboral y eso se ve reflejado en el 64,4% de los casos.
En cuanto a los cambios físicos que se realizan las personas incorporando a su cuerpo siliconas, líquidos en la cadera o glúteos, el 79,9% respondió que sí lo hace, en tanto que el 17% se hace atender en clínicas privadas y el 94,4% en lugares clandestinos.
Respecto a la alfabetización jurídica, el 41% se orientó sobre la discriminación o hechos de violencias relacionados con el género, el 60,1% en la Ley de Identidad de Género y el 79,9% conoce organizaciones que protegen de la discriminación.
Un 28% desconoce cómo defenderse ante la violencia y la discriminación.