Cada 8 de junio se celebra el Día Mundial de los Océanos. Desde 2008, se trata de un día en el que se pretende concientizar a la población mundial sobre la importancia que tienen para la existencia de los seres vivos. Los océanos cubren el 71% de la superficie del planeta.
El 5 de diciembre de 2008 la Asamblea General de las Naciones Unidas, por iniciativa de Canadá, resolvió que a partir de 2009 cada 8 de junio sería el Día Mundial de los Océanos.
La ONU eligió la fecha 8 de junio, ya que el 80% de la contaminación en los océanos está causada por los seres humanos, debido a que ocho millones de toneladas de plástico al año acaban en nuestros océanos, causando estragos en la vida silvestre, la pesca y el turismo.
La contaminación por plástico cuesta en los océanos la vida de un millón de aves marinas y de 100 mil mamíferos marinos al año. El plástico genera daños por ocho mil millones de dólares cada año al ecosistema marino.
La idea de un Día Mundial de los Océanos se propuso por primera vez en 1992 en la Cumbre de la Tierra de Río de Janeiro como recordatorio sobre el papel crucial que el océano desempeña en los humanos y cómo estos pueden ayudar a protegerlo.