La Fundación Banco Municipal destacó en su informe la caída en la Población Económicamente Activa, lo que llevó a una disminución de los niveles de desempleo
El aglomerado Gran Rosario experimentó una disminución en las cifras de desempleo en medio de la crisis económica que afecta a todo el país desde principios de año. Sin embargo, esta baja en el desempleo está vinculada a una reducción en la cantidad de personas que buscan trabajo, más que a una mejora real en el mercado laboral.
Un informe de la Fundación Banco Municipal (FBM) destaca que la caída en la Población Económicamente Activa (PEA) ha llevado a una disminución de los niveles de desempleo. Sin embargo, esto no es un signo de fortaleza económica. «La retracción de la fuerza laboral se debe a las escasas oportunidades que ofrece el mercado. Esta situación, junto con los bajos salarios en empleos de menor calidad, ha incrementado el porcentaje de trabajadores que se encuentran por debajo de la línea de pobreza», detalla el informe.
Durante el primer trimestre de 2024, la Población Económicamente Activa en el Gran Rosario se contrajo un 4,1% interanual, retrocediendo a niveles similares a los de 2021. La cantidad de ocupados alcanzó el mínimo de los últimos siete años, con 37 mil personas. Esta reducción en el desempleo no refleja un aumento en el empleo, sino una disminución en la cantidad de personas que buscan trabajo activamente.
Impacto en los ingresos
Los ingresos en el aglomerado sufrieron una pérdida significativa de poder adquisitivo. En el último trimestre de 2023, se redujeron en promedio un 25% en comparación con 2017. Las remuneraciones de cuentapropistas y asalariados informales alcanzaron el nivel más bajo de los últimos seis años.
El Índice de Salarios, que abarca el sector registrado público y privado, así como el privado no registrado, mostró una suba del 45,5% en el primer trimestre de 2024. Sin embargo, la inflación en el mismo período fue del 51,6%, lo que ha erosionado aún más el poder adquisitivo de los trabajadores.
Esta situación ha incrementado el número de trabajadores bajo la línea de pobreza, aquellos que integran hogares que no pueden adquirir la canasta básica total. La tasa de pobreza para la población ocupada creció en 2023, alcanzando niveles similares a los de 2020 y los más altos en seis años. Esto se debe principalmente al aumento en la tasa de pobreza entre cuentapropistas y asalariados informales, que representan el 44% del total de ocupados.
El informe de la FBM resalta un deterioro en los niveles de vida de quienes ocupan empleos de menor calidad, muchos de los cuales se unieron al mercado laboral recientemente para complementar ingresos, mientras la fuerza laboral comienza a contraerse. En el último trimestre de 2023, el porcentaje de ocupados en empleos informales fue bajo en comparación con años anteriores (44% frente al 48% promedio), reflejando en parte el efecto desaliento.
Este panorama resalta la creciente precariedad del mercado laboral en Gran Rosario, donde la disminución del desempleo no se traduce en una mejora de las condiciones económicas para los trabajadores, especialmente para aquellos en empleos informales y de menor calidad.