La derrota en la final ante Fluminense dejó al DT Jorge Almirón en la cuerda floja y varios jugadores al borde de la salida
Por Eduardo Martínez, enviado especial – Télam
En la medición de los costos por no no alcanzar la anhelada séptima Copa Libertadores, el colombiano Frank Fabra, de irresponsable expulsión en el Maracaná, y Valentín Barco, el futbolista más preciado del plantel, encabezan la nómina de posibles salidas en Boca, luego de perder la final con Fluminense de Brasil.
Los interrogantes no sólo se centran en los futbolistas sino también alcanzan al director técnico Jorge Almirón, cuyo contrato vence a fin de año, días después de las elecciones de autoridades en el club, en las que el oficialismo intentará retener el poder ante la oposición vinculada al expresidente Mauricio Macri.
Fabra, un jugador muy valorado por Juan Román Riquelme, se puso por propia iniciativa en estado de revisión con su insólita expulsión en el tiempo agregado de la final, lo que le impidió a su equipo jugar con superioridad numérica para revertir el 1-2 en el último cuarto de hora.
El colombiano quedó como el gran apuntado por los hinchas, lo que pone en duda la continuidad de su ciclo en el club, iniciado en 2016. No es la primera vez que recibe una tarjeta roja infantil. También había sido expulsado en la semifinal revancha con Santos (0-3), en Brasil, que significó la eliminación en la Libertadores 2020.
Los referentes del plantel quedaron molestos con la actitud de Fabra, a quien le restan dos años más de contrato. «A veces reaccionamos mal como le pasó a Frank. Una pena porque no pudimos aprovechar el hombre de más que tuvimos en ese cortito plazo, sabiendo que teníamos 15 minutos del segundo tiempo del alargue para hacer otra cosa″, afirmó Sergio «Chiquito» Romero, capitán en el Maracaná, en ausencia de Marcos Rojo.
Paralelamente, Barco tiene muchas posibilidad de emigrar del club a fin de año para seguir su carrera en el exterior. Durante todo el semestre en curso, su nombre estuvo vinculado a la Premier League.
El juvenil de 19 años, reemplazado en el segundo tiempo por Luca Langoni, no tuvo un buen partido después de una semana en la que fue preservado por una molestia muscular que le impidió llegar en plenitud a la final.
A diferencia de lo que sucede con Fabra, el «Colo» Barco es el jugador más mimado por los hinchas de Boca, un mérito que se ganó en apenas seis meses tras la decisión de Almirón de subirlo de Reserva a Primera.
A mitad de año, Brighton de Inglaterra realizó una oferta de 9 millones de euros por el 85% del pase del jugador pero Boca rechazó la propuesta al considerarla insuficiente.
Manchester City también se rumoreó como club interesado en su contratación, aunque nunca concretó una oferta formal. Barco, con vínculo hasta diciembre de 2024, tiene un valor de mercado de 10 millones de euros.
Riquelme, en declaraciones recientes, admitió que buscarán mejorarle las condiciones económicas antes del vencimiento del contrato actual, lo que implicaría elevar la cláusula de rescisión con el club.
El representante del jugador, Adrián Ruocco, es el mismo de Carlos Tevez y no mantiene una buena relación con los miembros del Consejo de Fútbol de Boca.
Por esa situación, los partidos que restan de la Copa de la Liga y la Copa Argentina muy probablemente sean los últimos del zurdo con la camiseta «azul y oro».
El diario catalán Sport publicó recientemente un artículo titulado: «La joya del Boca Juniors que llama la atención de toda Europa», que aseguraba la intención del Manchester City por avanzar en su transferencia durante el próximo mercado de invierno en ese continente.
Otros dos jugadores de Boca con próximo destino europeo son Ezequiel Fernández y Cristian Medina, quienes podrían seguir los pasos de Alan Varela, vendido este año al Porto de Portugal.
«Equi» Fernández volvió a comienzos de año de un préstamo a Tigre y en los últimos encuentros se ganó la titularidad. Su nombre figura como eventual refuerzo para Brighton y Liverpool. Boca le firmó contrato hasta diciembre de 2025.
En cuanto a Medina, con vínculo hasta 2027, también es requerido por dos clubes europeos que no trascendieron, aseguraron a Télam fuentes de club.
Por otra parte, el arquero Javier García (36), el defensor Facundo Roncaglia (36) y el mediocampista Diego «Pulpo» González (35) terminan sus contratos el 31 de diciembre y casi con seguridad marcharán de Boca.
El mediocampista Juan Ramírez y el lateral derecho Marcelo Weigandt tampoco tienen asegurada su continuidad por la falta de oportunidades, aunque en ambos casos la situación podría cambiar si se concreta el final de la relación con el entrenador.
Para eso hay que espera al desenlace de la temporada y, fundamentalmente, al resultado de las elecciones.