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EE.UU. proclamó unilateralmente que vuelvan a regir las sanciones de ONU a Irán


El gobierno de Trump prometió "imponer consecuencias" a cualquier Estado miembro que no las cumpla

Estados Unidos proclamó este domingo unilateralmente que las sanciones de Naciones Unidas (ONU) contra Irán volvieron a entrar en vigor y prometió castigar a quienes las violen, una medida que corre el riesgo de aumentar su aislamiento pero también las tensiones internacionales.

«Hoy Estados Unidos da la bienvenida al regreso de prácticamente todas las sanciones de la ONU previamente levantadas a la República Islámica de Irán», dijo en un comunicado el secretario de Estado, Mike Pompeo, reportó la AFP.

Según el jefe de la diplomacia estadounidense, las medidas «volvieron a estar en vigor» a partir de las 8:00 pm hora de Washington (00H00 GMT del domingo), aunque las posiciones en el Consejo de Seguridad de la ONU son contrarias a esta decisión.

El gobierno del presidente Donald Trump también prometió «imponer consecuencias» a cualquier Estado miembro de la ONU que no cumpla con las sanciones, a pesar de ser uno de los únicos países del mundo que cree que están en vigor.

La amenaza concreta es que a los países que Washington considere que desafían esta postura se les negará el acceso al sistema financiero y a los mercados estadounidenses, lo que preanuncia una escalada de tensiones con varios países.

«Si los Estados miembros de la ONU no cumplen con sus obligaciones de aplicar estas sanciones, Estados Unidos está dispuesto a utilizar nuestras autoridades nacionales para imponer consecuencias por esos incumplimientos y asegurar que Irán no se beneficie de la actividad prohibida por la ONU», declaró Pompeo.

Se prevé que Trump, que busca su reelección en las elecciones del 3 de noviembre, podría desvelar esas medidas durante su discurso en la Asamblea General de la ONU programado para el martes próximo. Washington está prácticamente solo: las otras grandes potencias, Rusia, China, pero también los aliados europeos de los estadounidenses, cuestionan esta postura de Estados Unidos.

«Cualquier decisión o acción tomada con vistas a reimponer (las sanciones) sería incapaz de tener efecto legal», dijeron Francia, Gran Bretaña y Alemania en una carta conjunta enviada ayer al Consejo de Seguridad, según reportó la AFP, que obtuvo una copia.

Desde Irán, el ministro de Relaciones Exteriores, Mohamad Javad Zarif, dijo que los estadounidenses «se dan cuenta de que es una declaración falsa». A mediados de agosto, el gobierno de Trump sufrió un rotundo revés en el Consejo de Seguridad de la ONU en su intento por extender el embargo de armas convencionales contra Teherán, que expira en octubre.

Acusando en un ataque de rara violencia a Francia, Reino Unido y Alemania de haber «elegido alinearse con los ayatolás» en el poder en la República Islámica, Mike Pompeo desencadenó el 20 de agosto un procedimiento controvertido, apodado «snapback», y que se suponía que haría posible restaurar todas las sanciones de la ONU contra Irán un mes después.

Las sanciones se levantaron en 2015, cuando Teherán se comprometió, en el marco de un acuerdo internacional, a no adquirir armas nucleares, y luego Estados Unidos denunció ese acuerdo y se retiró. Ahora, en una pirueta legal, Estados Unidos invoca su condición de país «participante» de pacto que abandonó de manera estrepitosa con el único objetivo de activar el «snapback». Casi todos los demás países miembros del Consejo de Seguridad impugnan la capacidad de Washington para valerse de esta condición y, por lo tanto, no han seguido su enfoque.