No fue tan sólo un domingo lluvioso. Una fuerte tormenta azotó Rosario en las últimas horas y, por supuesto, trajo sus consecuencias. Cayeron casi 30 milímetros de agua durante toda la jornada de ayer.
Con fuertes ráfagas de viento, que alcanzaron los 70 kilómetros por hora, hubo de todo: volaron techos, ramas, árboles y hasta corralitos de Aguas Provinciales en las calles.
Se registraron cerca de 20 árboles caídos en la ciudad, producto del fuerte viento que tuvo su pico más alto desde las 19 en adelante.
El domingo comenzó amenazante pero la lluvia se hacía esperar. Ya más entrada la tarde, comenzaron las primeras gotas y luego el cielo se sacó las ganas contenidas desde hace tiempo: llovió lindo en toda la ciudad.
Para este lunes se espera nubosidad variable y, según indica el pronóstico, el martes podrían volver las lluvias.
Foto: gentileza @belitaonline