“Los partidos nunca se ganan antes de jugarlos”, remarcó el Matador tras la derrota frente a Arabia Saudita en el debut mundialista
El ex delantero Mario Alberto Kempes, campeón del mundo con la Selección argentina en 1978, criticó hoy al equipo del entrenador Lionel Scaloni tras perder en el debut en el Mundial de Qatar 2022 frente a Arabia Saudita por 2 a 1 y sostuvo que “sobró un poquito al rival” en la primera jornada del Grupo C.
“Fue un partido que se complicó porque Argentina no encontró el espacio, no encontró el momento. No tuvo un buen partido. Arabia Saudita jugó tal y como uno preveía y bueno, le ganó la partida”, dijo el “Matador” en declaraciones radiales, y agregó sobre el elenco albiceleste: “No supieron leer el partido ni estar a la altura de las circunstancias”.
A su vez, añadió: “No sé si será que los 36 partidos invictos pudieron influir, pero nunca se había jugado frente a una selección dentro de las 20 clasificadas. Ahora Arabia Saudita mostró cómo le tienen que jugar a Argentina, con mucha fuerza, presión, no dejándolo jugar”.
En la misma línea, continuó: “No aparecieron las grandes figuras de Argentina y eso hizo que se inclinara la balanza para el lado de Arabia Saudita. Yo creo que en la precipitación se desarmó la mitad de la cancha, sitio donde vos tenés mayor poder. Pero las imprecisiones y los dos goles que le hacen en menos de diez minutos aflojaron un poco los planes y bueno, la desesperación te puede hacer equivocar”.
Además, Kempes endureció el cuestionamiento: “Esto hay que tomarlo con mucha tranquilidad, aprender de los errores cometidos. Los partidos nunca se ganan antes de jugarlos. Yo creo que Argentina sobró un poquito al rival, muy cancheritos en algunos momentos, y lo pagó”.
“Ahora hay que ponerse otra vez el mameluco de laburo, olvidarse de que son las figuras y los elegidos por todos como candidatos a ganar el campeonato del mundo, y empezar de cero. Ya se han dado cuenta que por no jugar con selecciones potentes de Europa, porque tampoco se podía, pasan estas cosas”, cerró.