El ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, ratificó hoy a economistas que habrá una reducción del déficit «más rápida y acelerada», y dijo esperar que la reciente devaluación no se traslade totalmente a precios.
La directora de C&T Asesores Económicos, María Castiglioni Cotter, dijo a NA que vio al ministro «muy confiado y tranquilo».
«Lo vi confiado en que las medidas que se están tomando llegarán a buen puerto», sostuvo la especialista.
Dijo que en el encuentro se «hablaron un mix de temas, donde el ministro escuchó nuestra visión sobre el corto y mediano plazo de la economía, como ya lo había hecho con otros economistas».
«En grandes líneas el ministro nos confirmó que habrá una reducción gradual del gasto, pero más rápida y acelerado, como en parte ya lo había confirmado cuando anunció la reducción de la meta de déficit del 3,2 al 2,7 por ciento» sobre el Producto Bruto, señaló.
La economista participó junto a sus colegas Daniel Artana (FIEL), Marina Dal Poggetto (Eco Go), Marcos Buscaglia (Alberdi Partners) y Dante Sica (ABECEB) de una reunión de análisis sobre la actualidad económica, convocada por Dujovne.
El ministro les dijo que «si bien en el corto plazo la inflación será mayor, no espera un traslado demasiado grande de la reciente devaluación a los precios».
Castiglioni Cotter estimó que este año la inflación se ubicará alrededor del 25%, como la del año pasado, lo que implicará que se frenó el proceso de desinflación, y esperamos un tasa de crecimiento económico más bajo de los esperado, en torno al 1,3% o 1,5%».
La economista señaló que esos pronósticos «tienen que ver con la turbulencia cambiaria, que se suma al impacto estacional de la inflación por el aumento de tarifas, y al impacto fuerte que tendrá la sequía en la actividad económica».
Consideró que la apuesta económica «ahora es minimizar el impacto de la devaluación para que la inflación no se dispare».
Castiglioni Cotter estimó que esa derivación a precios «será gradual, porque los consumidores hoy tienen muchas más opciones y las empresas no van a recargar todo a precios por el temor a perder volumen de ventas».