El ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, reconoció esta mañana que la nueva suba de tasas dispuesta por el Banco Central tiene un efecto recesivo, pero aseguró que «peor era si nos quedábamos de brazos cruzados, sin hacer nada».
«Estamos convencidos que la suba de tasas de interés le va a quitar volatilidad al mercado cambiario. Entendemos que esa volatilidad es lo que más afecta a la actividad, pero reconocemos que la suba de tasas tendrá su impacto» en la economía, puntualizó el funcionario.
Este viernes, el Banco Central resolvió aumentar la tasa de política monetaria en 675 puntos, a 40%, para intentar frenar la corrida cambiaria que viene erosionando las reservas internacionales desde el 5 de marzo.
Asimismo, la autoridad monetaria amplió el ancho del corredor de tasas: las tasas a 7 días se ubicarán en 47% para el pase activo y 33% para el pase pasivo; las tasas a un día se ubican en 57% para el pase activo y 28% para el pasivo.
En una conferencia de prensa que brindó junto a su par de Finanzas, Luis Caputo, en el microcine del Palacio de Hacienda, Dujovne enfatizó que el objetivo del Gobierno es «llevar tranquilidad» a la población, a pesar de la disparada del dólar.
«Estamos dando mensajes contundentes», resaltó el ministro, quien a la vez subrayó que el Banco central «tiene todo nuestro apoyo para hacer todo lo que tenga que hacer con el fin de alcanzar la meta de inflación del 15% para este año».
En ese sentido, Dujovne ratificó que -pese a la volatilidad del mercado cambiario y el ajuste en las cuentas públicas- «las metas de inflación no se cambian, porque son las que organizan nuestro programa económico».
A fines del año pasado, el Gobierno anunció que las metas de inflación serán del 15% este año, 10% en 2019 y 5% en 2020, porcentajes que este viernes fueron ratificados por el ministro de Hacienda.