El ataque con explosivos de presuntos guerrilleros del Ejercito de Liberación Nacional (ELN) ocurrió en las afueras de Cúcuta, en la frontera con Venezuela
Al menos dos soldados murieron y 11 más resultaron heridos en un ataque con explosivos de presuntos guerrilleros del Ejercito de Liberación Nacional (ELN) en las afueras de Cúcuta, en la frontera con Venezuela, informó hoy el ejército.
Los militares se transportaban en un vehículo por una zona rural cuando estalló a su paso un «artefacto explosivo improvisado», detalló la institución en un comunicado recogido por las agencias de noticias AFP y Sputnik.
El comandante del ejército, general Eduardo Zapateiro, describió en un tuit el atentado como un «acto terrorista que infringe flagrantemente el derecho internacional humanitario».
El ELN, la última guerrilla reconocida en Colombia tras la firma de la paz con las FARC en 2016, no se ha pronunciado sobre el ataque.
El alto mando militar en Colombia asegura que esa organización emplea como retaguardia el territorio venezolano con la complicidad de autoridades chavistas.
Según las autoridades, unos 900 guerrilleros del ELN se ocultan del otro lado de la frontera, pero el gobierno de Nicolás Maduro niega esas denuncias.
El atentado fue rechazado por el ministro de Defensa, Diego Molano.
«Rechazo enérgicamente el vil y cobarde atentado terrorista del ELN contra soldados de nuestro Ejército en zona rural de Cúcuta, donde fueron asesinados dos de nuestros héroes de la patria y 11 más resultaron heridos», escribió en su cuenta de Twitter.
«Una vez sucedidos los lamentables hechos, tropas de la Segunda División del Ejército, con apoyo de la Fuerza Pública, desplegaron sus capacidades para dar con los responsables de este atentado terrorista. No descansaremos hasta neutralizarlos», agregó.
En 2018 una delegación del ELN inició diálogos de paz con el entonces presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, en busca de un pacto que cerrara por completo el conflicto interno de más de medio siglo.
Sin embargo, el presidente conservador Iván Duque rompió los diálogos que sostenía su antecesor tras un ataque con carro bomba contra una academia de policía en Bogotá que dejó 22 víctimas, además del agresor, en enero de 2019.
Colombia atraviesa la peor oleada de violencia desde el desarme de las FARC, pues disidentes del acuerdo de paz, ELN y bandas de origen paramilitar se disputan las rentas del narcotráfico y la minería ilegal.