Trabajadores de la educación rechazaron contundentemente la media sanción que logró la reforma en la Cámara de Senadores
Los docentes públicos y privados de Santa Fe realizarán un nuevo paro el próximo jueves, en medio del debate por la Reforma Jubilatoria que impulsa el gobierno provincial. La medida afectará a todas las escuelas de la provincia y estará acompañada por una manifestación frente a la Legislatura, coincidiendo con la sesión en la que los diputados provinciales podrían darle sanción definitiva al controvertido proyecto.
El paro está programado para el 12 de septiembre, justo un día después de la celebración del Día del Maestro, por lo que las clases ya se verán interrumpidas el miércoles 11. Este nuevo paro surge en respuesta al avance del proyecto de reforma que ya obtuvo media sanción en el Senado el pasado jueves, tras una sesión express en la que fue aprobado sin un debate profundo, generando malestar entre los gremios docentes.
Amsafé, el sindicato de los docentes públicos, ya se movilizó la semana pasada frente al edificio legislativo, y ahora se suma el Sadop, que agrupa a los docentes privados. Se espera que la adhesión al paro sea masiva, afectando tanto a las escuelas públicas como privadas, lo que amplificará el impacto de la protesta en todo el sistema educativo provincial.
El proyecto, que ahora será tratado en Diputados, parece encaminado a su aprobación sin mayores obstáculos, gracias a la mayoría automática del oficialismo en la Cámara. De hecho, los legisladores decidieron modificar su calendario de sesiones para agilizar el tratamiento de la reforma, sesionando el 12 de septiembre en lugar del 19, como sería habitual. Esta decisión refuerza la percepción de que la aprobación definitiva es inminente y que el trámite en Diputados será rápido, al igual que en el Senado.
En respuesta a la medida de fuerza, el Ejecutivo provincial ya anunció que descontará el día de paro a los docentes que no concurran a trabajar y habilitará un registro para que aquellos que sí asistan no se vean afectados por las sanciones. La tensión entre el gobierno y los gremios sigue escalando, con los docentes decididos a resistir una reforma que consideran perjudicial para sus derechos jubilatorios.