Un emotivo acto se realizó este domingo cuando a las 9.38 sonaron las sirenas de los Bomberos. Pidieron que en 2024 el homenaje sea dentro ya del memorial
A las 9.38 de este domingo, las sirenas resonaron fuerte en Salta 2141, marcando el inicio de un emotivo acto conmemorativo en honor a las víctimas de la trágica explosión que cambió la historia de Rosario hace una década. Fue un 6 de agosto de 2013 cuando la explosión en el edificio dejó 22 vidas perdidas, más de 60 heridos y un dolor profundo que aún perdura en los corazones de la comunidad.
Familiares y amigos de las víctimas encabezaron el acto, cargado de emoción y con un firme reclamo de Justicia. Entre las voces que se alzaron en el acto, surgió un deseo compartido: que el próximo año la ceremonia se celebre en el interior del Espacio Cultural y Educativo de la Memoria y la Música, que se erige en el lugar donde ocurrió la tragedia.
Las sirenas de los bomberos marcaron el inicio del homenaje, seguidas por la lectura de los nombres de las 22 víctimas y un conmovedor video enviado por el cantautor León Gieco, quien dedicó su emblemática canción «La memoria» a la ocasión. Las lágrimas se mezclaron con los recuerdos mientras las imágenes se proyectaban en una pantalla gigante en el escenario.
La cantante Cecilia Petroccelli interpretó «Razón de Vivir», de Víctor Heredia, acompañada por Pablo Pascualis, Adriana Canisalis y Marcelo Merenguelo. Las voces resonaron en un tributo que capturó la esencia de la conmemoración.
Los familiares de las víctimas compartieron sus palabras, y un video ilustrativo enfatizó la lucha por la Memoria, Verdad y Justicia. Si bien no hubo una foto grupal como en años anteriores, la comunidad se mantuvo unida en el recuerdo de sus seres queridos.
El acto culminó una hora después con la interpretación de «22 libros abiertos», a cargo de los compositores Carlo Seminara y Alejandro Bluhn. Las voces de Yanina Bolognese y Julian Venegas, acompañadas por Gabriel Gimenez, Rodrigo Calvagna y alumnos de la Escuela de Música Carlos Gustavino, abandonaron una última nota de homenaje en el aire.
Entre las personalidades presentes se encontraron autoridades locales y provinciales, incluyendo al intendente Pablo Javkin.
En esta década, el gasista Carlos García, único condenado en el caso, cumple su arresto en su hogar, sosteniendo que la verdadera responsabilidad recae en la empresa Litoral Gas.
A medida que pasa el tiempo, la memoria de aquel fatídico día se mantiene viva en la comunidad de Rosario. Las familias de las víctimas se reúnen cada año para recordar a sus seres queridos y seguir exigiendo justicia. Este aniversario de diez años no fue la excepción, un recordatorio doloroso pero necesario para honrar a quienes perdieron sus vidas y para mantener viva la esperanza de un futuro más seguro y justo para todos.