La inseguridad parece no tener fin en Rosario. Y ningún barrio está exento. Muchas veces se insinúa que los delitos sólo ocurren en las periferias de la ciudad, pero en el corazón de nuestra localidad también son constantes los robos y arrebatos.
Esta vez, la zona de la comisaría 2ª, ubicada en Paraguay 1145, volvió a ser centro de denuncias por parte de vecinos y comerciantes que viven preocupados e indignados ante la realidad que los atraviesa.
Quienes viven o trabajan en esa área, reclaman desde hace tiempo mayor patrullaje y seguridad ante los constantes robos que sufren. Hasta afirmaron que en la zona hay «aguantaderos».
Este mediodía, dos sujetos trataron de robarle a la dueña de una juguetería en 3 de Febrero y Entre Ríos a punta de pistola apuntándole en la cabeza, mientras dos mujeres esperaban en un auto.
La situación es tal, que algunos negocios optaron por poner seguridad privada, como la boutique situada en Corrientes y 3 de Febrero.
Las autoridades no responden, la policía no aparece, y el perjudicado, siempre es el ciudadano.