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Decenas de miles de personas se manifiestan en Francia contra Macron


Varias decenas de miles personas, incluyendo numerosos ferroviarios, protestaron este jueves en más de 130 movilizaciones en toda Francia contra el presidente, Emmanuel Macron. 

«Macron, presidente de los ricos» o «Macron, arrogante» eran algunos de los lemas que podían leerse en las pancartas o que coreaban los manifestantes de Montpellier (sur), donde un millar de personas salió a la calle, según la policía. 

En la manifestación de París, convocada -como el resto- por los sindicatos CGT y Solidaires, participaron 15.300 personas, según un recuento del gabinete Occurrence, 11.500 según la prefectura de la policía y 50.000, según la CGT. 

En la capital, el secretario general de la CGT, Philippe Martinez, pidió al Gobierno que «deje de tomarnos por imbéciles y nos diga qué quiere». Hacia las 14H00 GMT estallaron algunos enfrentamientos entre los participantes de la marcha y la policía, que respondió con gases lacrimógenos cuando algunos manifestantes les lanzaron proyectiles. Un grupo de encapuchados vandalizaron la fachada de un hotel y varios escaparates y mobiliario urbano. 

La protesta se extendió a otras ciudades como Marsella (sureste), donde Occurrence contó 5.700 manifestantes. En Lyon (este), la policía contabilizó 4.400 manifestantes, y en Rennes (oeste), 4.500. 

Por su parte, un 22,7% de los trabajadores de la compañía de ferrocarriles francesa SNCF -incluyendo al 66,4% de los maquinistas- hicieron huelga el jueves contra la reforma de su sector, que pone fin a la garantía del empleo para los nuevos contratados. 

Una treintena de ferroviarios bloquearon el tráfico en la estación de Lille (norte) por la mañana. 

Horas antes, la intersindical CGT-CFDT-Sud-Unsa de la SNCF anunció que suspendía el diálogo con la ministra de Transporte, Élisabeth Borne, a la espera de que el primer ministro Édouard Philippe se ocupe del asunto. 

La movilización afectó al sector de la energía, a algunos centros educativos, a los transportes públicos de Niza (sur) y la región parisina y al sector del audiovisual público. 

Además, se ocuparon o bloquearon facultades para protestar contra la reforma educativa que está preparando el Ejecutivo que, según los manifestantes, instaurará una «selección» para entrar en la universidad.