El juez federal de Salta Julio Bavio procesó a diez gendarmes del escuadrón 45 de Gendarmería por haber formado parte de una asociación ilícita que cobraba coimas para perrmitir el contrabando de mercadería en los tours de compras en Bolivia y luego cruzaban la frontera a nuestro país.
Los procesados son del escuadrón 45 de la Gendarmería Nacional y que tiene a cargo el control fronterizo entre nuestro país y Bolivia.
Fueron procesados por asociación ilícita los gendarmes Ricardo Gil; Federico Báez; Sofía Suárez; Maria Cristina Luján; Guillermo Tilleria; Roberto Bautista; Emanuel Cruz; Gisel Gil; Leonardo Torres y Roque Luján.
La causa se inició el 27 enero 2017 a raíz de la sospechas en controles irregulares de Gendarmería en los tours de compras de mercadería ingresada a nuestro país, la cual era comprada en Bolivia.
La mercadería, entre la que se encontraban ropa, cigarrillos y hojas de coca, ingresaba a nuestro país en micros, autos particulares y combis y luego era distribuidas en las provincias de Buenos Aires, Mendoza, Tucumán y Santiago del Estero.
Los tours de compras salían de la ciudad de San Ramón de la Nueva Orán en Salta con destino a Bolivia y una vez hechas las compras volvían a nuestro país con la mercadería.
La investigación realizada por el fiscal federal de Salta Eduardo Villalba incluyó que cuatro gendarmes disimulados entre pasajeros de distintos tours de compras, simularan ser pasajeros.
Previamente se les dio dinero a cada uno de los cuatro gendarmes, el cual estaba marcado, y el mismo lo utilizaron para reunir el dinero del soborno que cada contingente juntaba para pagar el soborno.
Se trata de la figura del agente revelador que permite el Código Penal como nueva figura de investigación.
Los sobornos eran reclamados por los gendarmes a cambio de no hacer los controles y bajo amenaza de incautarles toda la mercadería.
A raíz del dinero que estaba marcado y de ser identificados los gendarmes que integran la asociación ilícita, se los detuvo en sus puestos de trabajo e incluso se hallanaron sus domicilios: en total se les secuestró entre 500 a 600 mil pesos.