Entrevista

Dady Brieva: «Hoy los números teatrales son comprobables»


Por Santiago Fiszbein

Es uno de los más grandes comediantes que tiene el país. Dueño de un humor único y campechano que siempre es cómplice con el público.

En su Santa Fe natal unió fuerzas con Miguel del Sel y el Chino Volpato y formaron un trío cómico que triunfó en el país y en Latinoamérica. Ellos se convirtieron en los Midachi.

De ahí en más todo es historia. Desde el año pasado decidieron regresar al teatro con Midachi Kindon y fue un gran éxito. El viernes 22 y el sábado 23 de junio vuelven al teatro Broadway para brindar este show.

Pero antes de su presentación Dady Brieva charla un rato Con la gente, acerca de la actualidad del país y de su profesión.

– ¿Qué balance haces sobre esta vuelta de Midachi?

-Hicimos cinco funciones llenas en Neuquén hace poquito. Hemos metido 3.075 espectadores, para lo que está hoy por hoy el mercado es una locura. Hoy los números de los espectáculos teatrales se pueden saber como si fueran datos de la Afip, son comprobables. En esta gira que termina en julio y volvemos en agosto hasta noviembre en el teatro Lola Membrives de Buenos Aires, vivimos realidades distintas, buenas y malas. Tiene que ver con la realidad que vive el país.

-¿Cómo ves la realidad del país?

-La gente sabe lo que pienso, pero fuera de eso no puedo agregar o ver lo que está sintiendo todo el país. Inclusive los mismos del PRO, es inevitable lo ven todos. Estamos viviendo algo que no se sale, no sólo no se cumplieron las metas que se prometieron, sino que no se alcanzó ni el 10% que se prometió. Ninguna se pudo cumplir. Desconcertados los que los votaron y los que no los votamos sabíamos lo que iba a pasar. De todas maneras insisto, a mi me sorprende mucho que la gente mayor de 60 años que votó al PRO no haya pensado que esto iba a pasar. A mi me parece que no sólo es ingenuo, sino irresponsable.

-¿Pudiste hablarlo con Miguel  de esto o sólo se dedican al espectáculo?

-No, con Miguel compartimos lo que es del show; después cada uno tiene su ideología. No debatimos mucho de esto, porque los del PRO siempre están con el discurso de que hace poco que están y hablan todo el tiempo de una herencia pesada.

– Volviendo a tu carrera ¿Te gusta recordar tus raíces en cada uno de tus monólogos?

– Sí, ayer lo decía en un ejemplo que dí. Hay dos tipos de personas, las que nacimos del otro lado de la vía de tener un peso y una renovación y un salto social a través de una buenaventura económica y que no se resienten del pasado y se enorgullecen de dónde vienen; y esas personas que dinamitan su historia, que los han marcado mucho el resentimiento y que quieren olvidarse de dónde vienen. Yo me siento muy orgulloso de donde vengo y de todo lo que he logrado. Me parece que tendría que hacer marketing con eso, me parece que es una buena imagen para todos los tipos que no tienen la oportunidad de ser.

– Y los valores que te transmitieron tus viejos que los nombras

– Sí, valores como no dejar tirado a nadie en el piso, no pegarle al que se cae, con los hijos no te metes, ciertos respetos que se tenían y de cumplir la palabra. Esos son valores que ahora se baratean bastante.

– Estas haciendo mucho cine, y tuviste la oportunidad de laburar con dos directores importante

– Sí, con Mariano Cohn y Gastón Duprat hicimos «El ciudadano ilustre» y ahora «4×4». La segunda es una de esas películas de encierro. Acá yo interpreto a un ginecólogo que está cansado del sistema como Michael Douglas en «Un día de furia»; y hace un «cazabobos» con una camioneta blindada y cae Peter Lanzani y lo tiene cinco días encerrado y le hace de todo. Es la primera vez que se pone la inseguridad en una película, inclusive no como dejar ninguna moraleja. Los que la ven se quedan del lado del ladrón, es muy loco lo que va a pasar con esa película.

– ¿Creaste un vínculo con ellos?

– Sí, son buenos chicos porque son tipos con los que ya he trabajado y me parece que son bárbaros. Son muy piolas y te dejan laburar.