La tranquilidad de la calle de Port St. Lucie en Florida, Estados Unidos, se vio interrumpida este jueves por un insólito hecho. La policía llegó hasta el lugar después de recibir un llamado alertando que un auto hacía círculos en la calle de manera descontrolada.
Cuando los efectivos llegaron al lugar el auto seguía haciendo círculos y causando destrozos. Polícias y agentes no podían hacer mucho y no lograban detener el auto, por lo que tuvieron que llegar los bomberos. Todos observaban a la distancia cómo se movía el coche en reversa.
Finalmente, el rodado se detuvo gracias a que las autoridades se acercaron al vehículo e ingresaron el código de la llave en la puerta del conductor. En ese momento, ante la mirada atónita de todos, bajó del auto el insólito conductor, un labrador retriever negro adulto.
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Según las informaciones, el dueño de un Mercury Sable modelo 2003 color gris salió del auto, cerró la puerta y dejó adentro a su perro. «El perro, llamado Max, accidentalmente puso la palanca de cambios en reversa, haciendo que el automóvil diera vueltas», explicó la Policía en Facebook, donde publicó un video del incidente.
Afortunadamente, la policía destacó: «No se reportaron heridos y el auto sufrió daños menores. ¡Max estaba bien, sano y feliz!».