En la capital cubana, donde ya se suspendieron el transporte público y la gran mayoría de los servicios, se prohibirá a partir del 1 de septiembre la movilidad de personas y coches entre las 19 y las 5
Un toque de queda nocturno regirá en la ciudad cubana de La Habana los primeros 15 días de septiembre próximo, período en el que también se endurecerán aún más las medidas restrictivas ya vigentes para tratar de controlar los rebrotes de coronavirus en la isla.
En la capital cubana, donde ya se suspendieron el transporte público y la gran mayoría de los servicios, se prohibirá a partir del 1 de septiembre la movilidad de personas y coches entre las 19 y las 5, anunció el gobernador de La Habana, Reinaldo García.
También se restringirá al máximo la entrada y salida a la ciudad, que quedará incomunicada con el resto del país, como estrategia para cortar la trasmisión de la enfermedad hacia otras regiones, agregó, citado por la agencia de noticias EFE.
El tránsito fuera de la provincia solo podrá realizarse por «motivos excepcionales» y quedan vedados los viajes de los habaneros hacia polos turísticos en otras provincias, con lo que serán reintegradas o aplazadas unas 2.970 reservas hoteleras, informó García.
En la capital se limitará «significativamente» la circulación de autos, motos y otros medios de transporte privado, una regla que también se extenderá a los coches con placa estatal que circulan bajo la autorización de «vía libre», dijo. El funcionario apeló a la «comprensión» de los habitantes.
La normativa de excepción se mantendrá más allá del 15 de septiembre de ser necesario, e incluye también una mayor promoción del teletrabajo y la reducción de horarios en los comercios hasta las 16 de lunes a sábado y las 13 los domingos.
La Habana, considerada como el epicentro cubano de la Covid-19 desde sus inicios en marzo pasado, tuvo que cancelar su reapertura a principios de este mes debido a varios rebrotes extendidos hacia otras regiones del país. Cuba ya acumula 3.806 casos de coronavirus y 92 muertes.
La mayoría de la isla se encuentra en la tercera y última fase del plan nacional de reapertura, que suaviza restricciones como el uso de la mascarilla, requerida solo en lugares cerrados, activa el turismo local y restablece servicios al 50%.
La Habana no abrirá sus aulas el próximo 1 de septiembre como el resto Cuba, lo que significa un atraso considerable en la desconfinamiento de la isla, que tampoco prevé abrir sus fronteras hasta que la capital salga de esta crisis sanitaria.