Pertenecen a la Brigada Motorizada de la policía provincial. Estarán en prisión preventiva por seis meses
Cuatro agentes de la Brigada Motorizada de la policía provincial fueron imputados y permanecerán en prisión preventiva por seis meses, acusados de llevar a cabo un procedimiento plagado de irregularidades en el barrio República de La Sexta. Según la investigación del fiscal Pablo Socca, los efectivos habrían allanado ilegalmente una vivienda, detenido a un joven de 26 años, robado pertenencias, plantado un arma y falsificado documentación oficial para justificar sus acciones.
Los agentes implicados son el oficial Lucas Brest (33 años) y los suboficiales Matías Nicolás Ovando (29), Julián Oscar Márquez (27) y Bernardino Fernández (25). En la audiencia, se los imputó por una serie de delitos, entre ellos privación ilegítima de la libertad, falsedad ideológica de documento público, allanamiento ilegal, robo agravado, portación de arma de fuego y lesiones calificadas. La jueza Paula Álvarez dictó prisión preventiva para los cuatro acusados.
El caso
El hecho ocurrió el 7 de diciembre cuando los policías interceptaron a Milton Ezequiel P., un joven que circulaba en moto sin patente ni papeles. Según la imputación, tras comprobar que no había pedido de captura, los agentes lo retuvieron y lo obligaron a llevarlos a la casa de su hermano, donde irrumpieron sin autorización. Allí, lo golpearon, robaron dinero y pertenencias, y le sustrajeron un celular que había usado para grabar el operativo.
El joven intentó escapar por temor a represalias, pero fue nuevamente interceptado en la casa de su madre, donde los agentes habrían ingresado por la fuerza y repetido los abusos. Según el fiscal, los policías también plantaron un revólver calibre 38 para incriminar al joven, alegando que lo encontraron en un techo cercano.
Falsificación de documentos
La investigación reveló que los agentes habrían fabricado falsos para legitimar el procedimiento. Esto incluyó supuestas autorizaciones de ingreso a domicilios y actas de secuestro del arma. Un testigo declaró haber escuchado a los policías planear el montaje de pruebas, e incluso discutir la posibilidad de disparar al joven para justificar una fuga.
Pruebas bajo la lupa
El fiscal Socca destacó que las lesiones del joven fueron negadas en el informe médico policial, y que se desconoce el origen del arma utilizada como evidencia. Este caso es un ejemplo de más irregularidades policiales que continúan siendo objeto de preocupación en la región.
Con los agentes bajo custodia, la investigación sigue en curso para aclarar los detalles y determinar la responsabilidad de los involucrados.