En las primeras horas de cuarentena, se registró solo una detención por violación de la restricción, que se dio en Granadero Baigorria. Hasta ahora no está claro el protocolo a seguir
Por José Luis Juárez
Se están desarrollando las primeras horas de la cuarentena general por la pandemia del coronavirus en Argentina. Hay presencia policial en las calles de Rosario, que busca más que nada disuadir a la gente para que no salga y se quede en su casa. Sin embargo, no hay coordinación entre la fuerza provincial y la nacional, por lo que no están claras las directivas oficiales o el protocolo a seguir.
Hasta la mañana de este jueves el único incidente que involucró una detención por violación de cuarentena se dio en Granadero Baigorria, cuando aprehendieron a un joven de 20 años que estaba circulando en bicicleta y que, al notar la presencia policial, intentó darse a la fuga.
El operativo que está implementando la Policía mantiene las mismas unidades que usualmente hay en la calle. La idea es, en horas de la noche, evitar todo tipo de reuniones y de tránsito de personas por la calle. Durante el día, en tanto, se intenta disuadir a la gente para que no salga y se quede en su casa. No hay hasta el momento un protocolo o directiva oficial de cómo trabajar en este caso.
No hay una coordinación entre la fuerza provincial y la fuerza nacional. Se deberían haber reunido anoche, luego del anuncio del Presidente, para delinear formas de trabajo conjuntas. Pero hasta el momento cada una trabaja por su cuenta.
En horas de la mañana de este viernes clausuraron una librería en España al 900, pero no hubo detención: sólo clausura y notificación. Existen todavía varios interrogantes, por ejemplo qué sucede si se detiene a alguien. En ese caso, ¿a quién se le dará cuenta? ¿A la Justicia provincial o a la federal? Todavía no está claro.
Es por eso que esta cuarentena se torna «light», porque hay cosas que continúan en la nebulosa. Se intenta seguir controlando esta situación debido a que el movimiento de la gente, por ahora, en la zona de los barrios y en el centro es normal, ya que hay autorización para salir a comprar a los supermercados y almacenes.