"Es un asesinato que tiene como objetivo quedarse con todo el negocio que manejaba, como el del narcotráfico y los proveedores del Estado", dijo
El diputado provincial del Frente Social y Popular de Santa Fe Carlos Del Frade habló sobre el crimen de «Pillín» Bracamonte, el jefe de la barra de Central. El legislador advirtió que «es todo denso» lo que se encuentra detrás del asesinato y pronosticó que «se vienen días bravos» para Rosario.
«El asesinato del Pillín corta en dos la historia del presente criminal en Rosario. Tendrá la misma o una mayor profundidad de lo que sucedió después del asesinato del Pájaro Cantero», sentenció el diputado provincial y periodista.
«Es un asesinato que tiene como objetivo quedarse con todo el negocio que manejaba Pillín. No tiene que ver con los puestos de choripanes que hay alrededor de la cancha. Tiene que ver con el negocio del narcotráfico, con los proveedores del Estado provincial y los distintos contactos con grupos narcos. Es preocupante», comentó.
«Pillín» Bracamonte y su ladero Daniel “Rana” Attardo fueron asesinados a balazos este sábado por la noche, luego del partido en el que Central se enfrentó con San Lorenzo en el Gigante de Arroyito.
Respecto del crimen de Pillín, Del Frade agregó: «Era el único jefe de una barrabrava de primera división que permaneció por treinta años liderando esos negocios que surgen desde la cancha chica del fútbol y se expanden en la cancha grande de la realidad».
«No hay que olvidar que los jefes de las barrabravas no son sólo eso, son jefes de barras narcopoliciales barriales. Pillín era el hombre que sintetizaba la posibilidad de dialogar con distintos sectores. El asesinato de este sábado rompe lo que para nosotros era un paréntesis en el descenso de homicidio en Rosario», afirmó.
En este sentido, el legislador sentenció: «Estamos hablando del cuarto o quinto grupo más importante del narcomenudeo de Rosario. Están en disputa cientos de miles de dólares. Había un gran flujo de dinero legal e ilegal, eso está detrás de esto».
Por otro lado, el legislador consideró que se vienen días oscuros para la ciudad. «Es como el asesinato del Pájaro Cantero, no se sabía qué iba a pasar. En Rosario hay 60 bandas narcopoliciales. Si cada banda contiene 600 personas, esto va a generar que, en la lucha por la sucesión, haya un estallido de nuevas pandillas que van a creer que pueden manejar distintos negocios».
«Más allá de las primeras informaciones, es claro que los últimos tres atentados contra él y su gente en los partidos de Central como local exhibían una voluntad manifiesta de matarlo. Vienen días bravos en la ex ciudad obrera», advirtió.
Finalmente, el diputado relató: «Yo le dije a Pullaro y Cococcioni: esta calma es un paréntesis. La recuperación de las calles se hace con trabajo, educación, no con presencia de fuerzas de seguridad. Era una puesta en escena y quedó demostrado con este asesinato. Como pasó con el Pájaro, saltó todo por los aires».