"Nuestro deporte no puede ni debe escapar al debate público estamos obligados a enfrentarlo", reza el comunicado
«Nuestro deporte no puede ni debe escapar al debate público que esta situación provoca y estamos obligados a enfrentarlo», reza el comunicado. CLG habló con el presidente de la URR, Matías Gorosito
Por Gonzalo Santamaría
El crimen de Fernándo Báez Sosa conmocionó y tuvo un impacto directo en cada estamento de la sociedad. Ahora, el que se expresó públicamente fue la Unión de Rugby de Rosario (URR) con un comunicado que lamenta lo sucedido con el chico de La Plata y luego adjunta varias medidas para, desde su lugar, cesar con la violencia en la sociedad.
“Ante el aberrante asesinato de Fernando Báez Sosa, la URR acompaña en el dolor a sus padres, familias y allegados. Desde nuestra Unión, rechazamos todo tipo de violencia y acciones como la que llevaron a la muerte de Fernando, que conmocionan a la opinión pública y que se dan en un contexto de descontrol y violencia en nuestra sociedad, de la cual nuestra actividad no está exenta”, expone el comunicado en sus primeras líneas.
Luego dicta cuatro puntos a seguir por los 32 clubes afiliados: la URR extenderá sus facultades disciplinarias por fuera del contexto del deporte; obliga a los clubes a sancionar a quienes cometan hechos de violencia “dentro y fuera de la cancha, sean o no advertidos por los árbitros”; la unión será un organismo activo en medidas, programas y acciones que impongan desde la Unión Argentina de Rugby para concientizar contra la violencia; y por último, se generarán cursos de carácter obligatorio para dirigentes, entrenadores y jugadores contra la violencia y a favor del cuidado del cuerpo mismo y del rival.
CLG dialogó con Matías Gorosito, presidente de la Unión de Rugby de Rosario, quien advirtió que “tomarán cartas en el asunto” y comenzarán a “trabajar con un plan de acción, prevención”: “Es comprometer a todos los clubes a que con este documento se involucren y trabajemos en conjunto”, disparó.
El directivo hizo hincapié en el primer punto, el cual extiende las facultades disciplinarias sobre todo el que tenga condición de jugador de rugby. “Nosotros nos hacemos cargo para trabajar y mejorar. Tomamos medidas, vemos los temas a tratar, vamos a sumar profesionales y fundaciones para ver los temas de violencia en forma transversal, es decir, todo tipo de violencia”, explicó.
“Así, vamos a trabajar con los dirigentes, con jugadores de distintos niveles y reforzar lo que veníamos haciendo”, completó Gorosito.
El presidente tiene en claro que la Unión es “una parte pequeña de la sociedad”, no obstante aseveró: “Lo que podamos hacer para colaborar lo vamos a hacer”.
Matías Gorosito marcó a la categoría 76 de Duendes, en la zona sur de la ciudad, de la que él mismo formó parte y afirmó que el deporte cambió: “Pensá que hablamos 30 años atrás, si me preguntás para bien o para mal… la sociedad cambió, vos salís a la calle, no es lo mismo y está un poco más peor”.
“En ese marco tenemos que readaptarnos y afrontar todo lo que tiene la sociedad”, agregó Gorosito.
Lanzado como dirigente detalló que el trabajo que realizan desde el rugby para los 7.000 jugadores afiliados es una “orientación y forma de educación”: “De nuestra parte hacemos la formación, por eso revemos y queremos mejorar las cosas en cada jugador”.
De esta forma, analizó la relación rugby-violencia y sentenció: “Siempre que sale el rugby lo vinculan por el tema de violencia, en realidad no es un deporte donde se pregone la violencia, de ninguna manera”.
Y aclaró: “Es un deporte que tiene unos códigos y valores muy fuertes y se inculcan para que uno tenga ese respeto en la sociedad, pero cada uno toma su decisión”.
Por último, Gorosito dejó de lado el deporte que preside e involucró a todos los clubes y sus distintas disciplinas para analizar el trabajo social que realizan: “La contención social y la formación que tiene uno en un club es muy importante”.
- El comunicado completo:
Ante el dolor, nuestro compromiso
La UNIÓN DE RUGBY DE ROSARIO expresa su condena ante el aberrante asesinato de Fernando Báez Sosa y acompaña en el dolor a sus padres, familias y allegados.
Desde nuestra Unión, rechazamos todo tipo de violencia y acciones como la que llevaron a la muerte de Fernando, que conmocionan a la opinión pública y que se dan en un contexto de descontrol y violencia en nuestra sociedad, de la cual nuestra actividad no está exenta.
Nuestro deporte, que promociona valores como el respeto, la solidaridad y la inclusión, no puede ni debe escapar al debate público que esta situación provoca y estamos obligados a enfrentarla, generando las acciones necesarias y comprometiéndonos permanentemente para evitar los flagelos que conductas absolutamente reñidas con nuestros valores atrapen esta actividad deportiva y social que desarrollamos cotidianamente.
Para esto, desde la UNIÓN DE RUGBY DE ROSARIO, iniciamos las siguientes acciones:
La Unión extiende sus facultades disciplinarias a todos los jugadores/as y afiliados/as y personas comprometidas en el deporte, por hechos o actos violentos antideportivos dentro y fuera de las canchas de Rugby; la condición de jugador/a de rugby autorizará nuestra intervención.
Los clubes afiliados deberán implementar la aplicación de medidas disciplinarias a los jugadores/as que cometan actos violentos antideportivos dentro y fuera de la cancha, sean o no advertidos por los árbitros, sean o no sancionados.
La URR participará activamente de las medidas, programas y acciones puestas en marcha por la Unión Argentina de Rugby para la concientización contra la violencia, dentro y fuera de la cancha.
Generaremos cursos obligatorios para dirigentes/as, entrenadores/as y jugadores/as contra la violencia dentro y fuera de la cancha y concientización del cuidado del cuerpo mismo y el del rival y las personas.
La URR convoca semanalmente durante todo el año a miles de hombres y mujeres, jóvenes e infantes, a sus familias y allegados, a jugar, confraternizar e integrarse con el otro, nunca a enfrentarse con nuestros circunstanciales adversarios deportivos.
Nuestro compromiso, ante el dolor que nos toca vivir a todos, es reafirmar el trabajo permanente para evitar circunstancias en las que el deporte y nuestras actividades no queden atrapadas por conductas antisociales y reñidas con los valores que inculcamos permanentemente en cada uno de nuestros clubes, generando las medidas preventivas, educativas y formativas que contrarresten estos flagelos con la ayuda de especialistas de los distintos niveles públicos y privados.