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Crece la presión sobre Bielorrusia para liberar al opositor detenido


Roman Protasevich fue aprehendido luego del desvío de un avión comercial en el que viajaba por supuestos explosivos

Lituania alertó que el vídeo en el que el disidente bielorruso Roman Protasevich dice «estar bien» podría haber sido «obtenido mediante torturas» durante su detención tras forzar el desvío de un avión comercial, el Reino Unido y la ONU exigieron su «inmediata liberación», mientras que Rusia criticó a Occidente por cerrar el espacio aéreo de Bielorrusia «sin investigar objetivamente lo que sucedió».

Gabrielius Landsbergis, ministro de Relaciones Exteriores de Lituania, país en el que debía aterrizar el periodista arrestado, señaló que la grabación podría haber sido obtenida mediante el uso de «la fuerza, la tortura y la violencia» para lograr que dijera «esas palabras», de acuerdo a declaraciones que cita la agencia de noticias Europa Press.

«Podemos ver que en su rostro hay abrasiones, lo cual es sospechoso», apuntó el funcionario al reaccionar al video difundido en redes sociales en el que el joven de 26 años dice «estar bien» y afirma que las autoridades bielorrusa lo están tratando «de manera totalmente adecuada y con total respeto de la ley”.

«Continúo colaborando con los investigadores y empecé a confesar sobre la organización de manifestaciones masivas»”, agregó en la grabación, en la que al exredactor jefe del influyente medio opositor bielorruso Nexta se lo ve sentado frente a una mesa y se dirige a la cámara.

El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos exigió hoy la liberación inmediata del opositor y su pareja, Sofía Sapega, que se encontraban en Atenas al ser buscados por presuntos delitos de instigación a las protestas contra el presidente bielorruso, Alexander Lukashenko.

El primer ministro británico, Boris Johnson, también se sumó hoy al pedido de «liberación inmediata». «El vídeo de Protasevich es profundamente angustiante. Como periodista y apasionado defensor de la libertad de expresión, pido su liberación inmediata», tuiteó el premier y advirtió que las acciones de las autoridades bielorrusas tendrán «consecuencias».

Tras el episodio, el Reino Unido y la UE resolvieron cerrar su espacio aéreo a la circulación de aviones bielorrusos, lo que fue calificado hoy de «lamentable» por el vocero del Kremlin, Dmitri Peskov. «En esta cuestión solo podemos expresar nuestro pesar», dijo Peskov de acuerdo a la agencia de noticias Sputnik, al explicar que evitar volar sobre «un país bastante grande ubicado en el centro de Europa» es muy caro para cualquier aerolínea.

En este contexto, Peskov subrayó que «primero se debe investigar objetivamente lo que sucedió y luego discutirlo, partiendo de datos concretos» en lugar de «tomar una decisión rápida y sin ninguna investigación». Otras compañías aéreas no bielorrusas como Air France, KLM, Finnair y Singapore Airlines suspendieron también el sobrevuelo del espacio aéreo de Bielorrusia tras la recomendación de la UE. Ante esta situación, Bielorrusia invitó a varias organizaciones internacionales de transporte comercial a viajar a Minsk para establecer las «circunstancias» del hecho.

El vuelo de la aerolínea irlandesa Ryanair que iba de Atenas, Grecia, a Vilna, la capital de Lituania, y en el que viajaba Protasevich, fue desviado el domingo cuando se encontraba en el espacio aéreo bielorruso por una supuesta amenaza de bomba. Pese a que las autoridades del aeropuerto aseguraron que no había explosivos en el avión, un funcionario del Ministerio de Transporte bielorruso atribuyó la supuesta amenaza al movimiento palestino Hamas, que ya negó su implicación.

El vocero de la Cancillería bielorrusa, Anatoly Glaz, afirmó que las autoridades que desviaron el avión y capturaron a Protasevich «cumplieron plenamente las normas internacionales establecidas» y se quejó de que «están haciéndose acusaciones infundadas» por el incidente.