Marco Ruben abrió ayer la puerta para despedirse de Rosario Central. Ni bien anunció su cansancio mental por no poder revertir su bajo nivel futbolístico comenzaron a tejerse las versiones acerca de los destinos donde podría continuar su carrera.
El delantero canalla dejó en claro ayer que no se sentaría a hablar con ningún club del país. «Hace mucho tiempo ya dije que el fútbol argentino para mi se termina en Central», manifestó en Arroyo Seco en rueda de prensa tras la presentación del técnico interino José Antonio Chamot.
Sin embargo, a poco de difundirse sus sinceras palabras que se parecieron al inicio de una despedida del club de Arroyito, comenzaron las hipótesis sobre su futuro.
Si bien la decisión del jugador sería continuar en el extranjero, en Buenos Aires afirman que Chacho Coudet ya lo llamó para tentarlo y sumarlo a Racing.
Incluso ayer los periodistas especializados en el plantel de Avellaneda buscaban comunicarse con el representante del delantero en busca de algún indicio que lo acerque a la Academia.
Pero la última palabra no está dicha. Ruben ayer también expresó que su deseo sería seguir vistiendo la camiseta auriazul: «Fui claro diciendo que quiero terminar acá y si mi cabeza puede revertir esto seguiré».
El tiempo dirá si Ruben cambia de opinión y acepta conversar con Racing u otro club del país, o se va bien lejos o, porque no, se queda en Rosario.