Las entregas comenzarían durante el primer trimestre del año, mediante el sistema de Covax
El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) y la farmacéutica británico-sueca AstraZeneca firmaron hoy un acuerdo para distribuir 170 millones de vacunas entre 85 países, a través del sistema la iniciativa Covax.
Unicef y AstraZeneca firmaron un acuerdo a largo plazo para el suministro de dosis a través del Covax, puesto en marcha por la Coalición para la Promoción de Innovaciones en pro de la Preparación ante Epidemias (CEPI), la Alianza Gavi para las Vacunas (Gavi) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) para lograr un acceso equitativo a la vacuna a nivel mundial.
Este es el tercer acuerdo de este tipo para las vacunas, tras los ya anunciados con Pfizer y el Instituto Serum de India, informó la agencia Europa Press.
Está previsto que las entregas de la vacuna comiencen en el primer trimestre de 2021, de acuerdo con el Marco de Asignación de Covax, que toma en consideración varios factores, entre ellos: la preparación del país, las autorizaciones regulatorias nacionales y las disposiciones contractuales finalizadas, así como otras consideraciones operativas y de suministro.
Este acuerdo de suministro permitirá acceder a 170 millones de dosis garantizadas bajo el Acuerdo de Adquisición Anticipada (APA, en inglés) del Mecanismo COVAX con AstraZeneca, que estará disponible durante todo 2021.
El 11 de febrero Unicef anunció la firma de un acuerdo con Pfizer para el suministro de su vacuna durante 2021, como resultado de un convenio con el Instituto Serum de India para acceder a dos vacunas mediante transferencia de tecnología de AstraZeneca, incluida en la Lista de Productos de Uso de Emergencia (EUL) de la OMS el 15 de febrero, y Novavax, sujeto a la aprobación de la vacuna por parte de la OMS.
El Covax tiene como objetivo proporcionar millones de dosis de vacunas COVID-19 aprobadas para finales de 2021, lo que permitirá proteger a los trabajadores sanitarios en primera línea y a los trabajadores sociales, así como a otros grupos vulnerables y de alto riesgo.
Su meta es garantizar que las vacunas contra el coronavirus, seguras y efectivas, estén disponibles rápidamente y sean asequibles para todos los países del mundo, independientemente del nivel de ingresos.