Cómo afecta la pandemia a los distintos países de Centroamérica y cuáles son las medidas tomadas por las autoridades
El gobierno de Costa Rica anunció el lunes la reanudación parcial de algunas actividades tras verificar una caída de la curva de contagios de coronavirus, mientras el presidente de Guatemala, Alejandro Giammattei, advirtió que «lo peor está por venir» en su país en materia de «crecimiento» de los casos.
Costa Rica, que acumula 697 casos confirmados de coronavirus -con seis muertos y 287 recuperados-, detectó una caída de su curva de contagios, lo que representa un comportamiento «atípico» en comparación con el resto del mundo, afirmó el ministro de Salud, Daniel Salas.
Por ese motivo, agregó, el gobierno dispuso retomar “con prudencia y responsabilidad” algunas actividades a partir del 1º de mayo, tales como las de gimnasios, escuelas de natación y centros deportivos sin contacto, que podrán abrir a 25% de su capacidad. También podrán abrir los cines, con espacio de dos metros entre cada espectador, y peluquerías y salones de belleza, con cita previa, sin espera en sus salones y a 50% de la capacidad.
En cambio, seguirán cerrados bares, discotecas, iglesias, casinos, playas y parques, así como las fronteras, y suspendidos conciertos, actos masivos y las clases, y el gobierno resolverá el 11 de mayo si autoriza alguna de esas actividades.
En Guatemala, Giammattei -médico cirujano- afirmó que «lo peor está por venir» pues se espera un aumento de la cantidad de casos durante las primeras dos semanas de mayo. «En el día 40 (desde el primer contagio, la curva) se despega; nosotros ya pasamos el día 40 y a partir del día 40 empezamos a ver el crecimiento del número de casos», dijo el mandatario a una radio local.
Guatemala contabilizaba 500 casos confirmados de coronavirus (150 de ellos solo en los últimos cuatro días) y 13 fallecidos por la enfermedad desde que se detectara el primer contagio, el 14 de marzo, hace 44 días. Giammattei sostuvo que el sistema de salud guatemalteco acumula «50 años de abandono» y remarcó que el coronavirus «desnuda» las deficiencias de cada país en la materia, a tal punto que «aun los países más desarrollados han tronado» por la pandemia.
También El Salvador está «en fase de transmisión comunitaria total», por lo que «el riesgo de contagio es extremadamente algo», según advirtió su presidente, Nayib Bukele. El Salvador computaba 323 casos confirmados de coronavirus (25 en las últimas 24 horas, el registro diario más alto desde el indicio de la pandemia), de los cuales ocho personas fallecieron y 89 se recuperaron, según datos oficiales.
Cuba, en cambio, reportó 20 nuevos contagios, la cantidad diaria más baja en lo que va del mes, lo que elevó el total de casos confirmados a 1.389, de los cuales 56 personas fallecieron (dos el último día). Un equipo de “expertos” citados por el diario oficial Granma advirtió que «el pico (de la curva de contagios) debería alcanzarse a los 77 días de evolución de la enfermedad, lo cual debía ocurrir en Cuba para fines de mayo; sin embargo, igual que China y Corea del Sur, la isla ha logrado acercar la fecha de mayor incidencia».
Mientras tanto, en Panamá -el segundo país más castigado por la pandemia en Centroamérica, con 5.779 contagios y 165 decesos- renunció el viceministro de la Presidencia, Juan Carlos Muñoz, luego de que el Ministerio Público abriera una investigación por la compra por parte de ese organismo de respiradores con abultado sobreprecio, finalmente cancelada. Panamá no registraba hasta hoy ningún caso de coronavirus en geriátricos, lo que configuraba una excepción con respecto al resto del mundo, según la agencia de noticias EFE.