Opinión

Coronavirus argentino y otras yerbas: a la que te criaste nomás


Por Carlos Duclos

 

Hasta hace unos días, varios pasajeros se quejaron de que al arribar al Aeropuerto Internacional de Ezeiza, los controles debidos brillaban por su ausencia, como si el coronavirus fuera nomás que una novela, un reality show.

Ayer, el jefe de guardia del Hospital Argerich le comunicó al gobierno que la guardia estaba colapsada y que no les era posible recibir ningún tipo de pacientes. Las cámaras de televisión mostraron un momento dramático. Fue cuando arribó una persona infartada, trasladada por un móvil policial, que fue atendida con más amor por parte de los médicos y enfermeros que con adecuados recursos.

Mientras Italia acaba de cerrar sus fronteras y los países del primer mundo adoptan medidas urgentes y extremas, en Argentina no se ve una campaña publicitaria intensiva de los gobiernos nacional, provincial y municipal que explique a los ciudadanos qué medidas preventivas deben adoptar ante este mal que está al borde de la pandemia. Han sido los periodistas de todo el país, y siguen siéndolo, los que se han comunicado con médicos y han tratado de informar a la población, a través de notas y entrevistas, sobre medidas de higiene, comportamiento social ante un suceso que muchos sostienen que es más grave de lo que se informa.

Tal vez algunos meros administradores, devenidos gobernantes, supongan que las campañas de publicidad en materia de salud sean un gasto y no una inversión beneficiosa para la vida.

Y no se trata solo del coronavirus, sino de otras dolencias, como el dengue. Las recomendaciones a través de campañas publicitarias para instalar en la sociedad la “cultura de la salud y de la vida” están ausentes. En este aspecto, como dijo un lector hace unos días atrás con abundante razón: “Las campañas contra el coronavirus (y otras cosas) están por estas tierras hechas a la que te criaste nomás”.