Analía Boccomino, cantante y compositora porteña de la banda «Seda Carmín«, participó de una iniciativa gestada por el músico rosarino Edu Alvarado sobre la importancia de realizar controles para prevenir patologías como el cáncer de mama
Por Sofía Dalonse – EQC Noticias y CLG Noticias
Revolucionaria, rebelde, inquieta, comprometida y, sobre todo, rockera. Algunos de los atributos de Analía Boccomino, cantante y compositora porteña de la banda «Seda Carmín«, la llevaron a participar de una iniciativa gestada por un músico rosarino con el objetivo de generar conciencia a la sociedad, principalmente a las mujeres, sobre la importancia de realizar los controles para prevenir patologías, como el cáncer de mama.
La magia de la música para crear puentes y transformar la realidad
En un día que aparentaba ser quieto y apagado, típico de pandemia, Analía recibió una noticia que modificaría ese panorama y abriría nuevos caminos.
«Me llega un mensaje de Lula Bertoldi, la voz de Eruca Sativa, haciendo referencia a una banda de Rosario. Me muestra un tema y me asegura que yo era la indicada para hacerlo… Por tu experiencia personal y lo que sos como artista, me dijo Lula», contó. Se trataba de un proyecto del cual sería protagonista. No solo sería un desafío para exponer sus cualidades como artista, sino que implicaba la responsabilidad de otorgarle a esa canción una importante función social a partir de su testimonio de vida.
El creador de la iniciativa fue Edu Alvarado, cantante de la banda rosarina «Fruta Deliciosa», quien además de músico, es médico y cirujano mastólogo. Su idea era lanzar un tema musical, en el marco de la lucha contra el cáncer de mama. Pensó en la fuerza de Lula Bertoldi para interpretarlo, pero la cantante le sugirió a Boccomino, quien no solo pondría su voz, sino también el alma y la piel.
Alvarado no solo quedó convencido, sino también, entusiasmado por la recomendación de Bertoldi y el producto que podría lograr; la misma reacción con la que Boccomino recibió la propuesta.
Mediante la música se generó un puente mágico de conexión que permitió concretar «Temblando«, una canción que apunta a transformar la realidad, generando conciencia en cuestiones vinculadas a la salud.
«No dudé en participar, cuando me mostraron la canción me pareció hermosísima y acepté. Estábamos en plena pandemia, el encuentro fue muy loco porque mandaron a un productor a grabar a mi casa ya que no nos podíamos mover físicamente, pero estaba todo el amor y las ganas de participar en esta canción», expresó la artista.
Cantar para concientizar: su testimonio de vida
Si bien ser la voz de «Temblando» era para Analía un compromiso enorme, al mismo tiempo, se tornó sencillo por todas las sensaciones que generaba la letra de ese tema musical en su ser y logró apropiarse fácilmente de ella.
«Hace unos años empecé con un linfoma de Hodgkin. Supe sentir en carne propia cada palabra que canté en esa canción y pensé que era una buena forma de aportar algo a la sociedad«, expresó.
La cantante había sobrellevado esta compleja enfermedad por la que se forman células malignas (cancerosas) en el sistema linfático. En este sentido, relató: «Yo como rockera, joven, llevándome el mundo por delante, nunca me esperaba algo así. De un día para el otro me tocó y acá estamos. Esto fue hace seis años y hoy estoy acá, rockeando mucho. Lo cuento para que no tengan dudas de que todo se puede enfrentar, con amor, haciendo el tratamiento corres pondiente y siempre para adelante».
Al respecto, concluyó: «Como consejo todas las personas, no solo las mujeres, debemos chequearnos porque cualquier enfermedad que es agarrada a tiempo se puede tratar, siempre hay cosas para hacer; por eso es muy importante prevenir «
Una mujer que «abrió caminos» en el rock
Finalmente, Boccoomino habló de su rol como mujer en el mundo de la música y los cambios que se fueron generando en la sociedad: «Siempre trabajé mucho para aportar algo en esta lucha. Desde muy chica, me planté con mi banda, desde un lugar que no es tan convencional para la mujer. En el rock fue bastante difícil abrir esas puertas, esos caminos; hoy en día creo que hay mayor apertura de cabeza y esa lucha dio frutos».
Y cerró: «Ser líder de una banda de rock siendo mujer no era algo común y no fue nada fácil lograrlo, creo que fuimos abriendo camino para que en la actualidad sea más accesible para las chicas que se están iniciando en la música. Mi mensaje es que canten, pero no solo que se queden atrás como coristas, sino que se pongan adelante y sean protagonistas, con sus personalidades e impronta. Ese es el cambio que de a poco estamos logrando»