"Nunca antes en la historia argentina moderna se dio semejante desplome del PIB, a tanta velocidad", advirtió el director de Analytica
La economía argentina caerá entre 7 y 9 puntos este año por el impacto de la pandemia sobre un nivel de actividad que ya venía en retroceso, advirtió el director de la consultora Analytica, Ricardo Delgado. Estimó que, según cuando se empiece a relajar la cuarentena y como sea la salida del aislamiento preventivo, el Producto Bruto sufrirá una «caída realmente significativa».
«La mayor fue la del 2002, que caímos 11%, pero el punto es que en el segundo trimestre las estimaciones indican que el Producto bajará entre 13 y 16% respecto del primer trimestre de este año», indicó. Delgado hizo notar que «nunca antes en la historia argentina moderna se dio semejante desplome del PIB, a tanta velocidad y en un tiempo tan limitado».
Sobre la renegociación de deuda, consideró que «en el corto plazo y durante todo este año el efecto de la reestructuración o no será duro, porque la Argentina, como muchos de los países, va a tener bloqueado el acceso a financiamiento externo, probablemente por todo este año, por efecto de la mega crisis global».
«Evitar el default es importante para lo que viene a partir del 2021, porque si entrás en cesación de pagos, una vez que se abre la ventanilla y haya menos restricciones para operar en las actividades económicas, la Argentina va a estar última en la cola de aquellos que necesiten financiamiento, básicamente deuda para inversiones privadas», explicó.
Sobre la propuesta de reestructuración de deuda, consideró que es «una primera oferta, que inicia una negociación, por lo cual hay que analizar la letra fina, el bono por bono, cuál es la tasa de descuento, para definitivamente ver si la Argentina quiere reestructurar su deuda o no».
«Claramente no convendría un default, no hay razones objetivas para que la Argentina lo tenga», señaló. Consideró que los compromisos de este año «no son tan elevados teniendo en cuenta las reservas y que la Argentina generará un saldo comercial y de cuenta corriente superior a los 15.000 millones de dólares».