Policiales

Conmoción en un barrio cerrado de Funes: entregó $ 300.000 y 1.500 dólares al ser víctima de un falso secuestro express


Una vecina del barrio San Marino denunció que al llegar a su casa encontró su caja fuerte violentada y el faltante de dinero y joyas

 

Un cuantioso robo de dinero y joyas irrumpió ayer la paz habitual del barrio Funes Hills San Marino cuando una vecina notó, al regresar a su casa, que su caja fuerte había sido violentada. Rápidamente, según consta en la parte policial oficial, notó el faltante de joyas y las sumas de $ 300.000 y U$S 1.500, en efectivo.

Instantáneamente, se hizo presente en el lugar personal policial y de la Agencia de Investigación Criminal, para constatar los hechos e iniciar las pesquisas correspondientes. Tras ello, las cámaras de seguridad del lugar mostraron cómo la empleada se retiraba del barrio caminando.

Por su parte, la administración de San Marino aclaró esta mañana en un comunicado que “la seguridad del barrio no fue vulnerada desde el exterior”.

La historia detrás del millonario botín fue la declaración de una empleada doméstica que dice haber seguido las intrucciones de una voz masculina.

Rocío es empleada doméstica en una de las viviendas del barrio Funes Hills San Marino. Ayer, entre sus tareas de rutina, atendió un llamado telefónico que le cambiaría la vida. Era la voz de un hombre, que sin mediar palabra le dijo: “Tenemos secuestrada a la señora”.

La joven se desesperó y, según contó a la policía, empezó a acatar órdenes precisas que eran impartidas desde el otro lado del teléfono. En primer lugar, violó la caja fuerte y sacó lo que había -$ 300.000, U$S 1.500 y joyas-,luego se fue caminando de la casa, intentando mantener la calma.

Tras ello, y por pedido del falso secuestrador, tomó un taxi a la Terminal de Rosario y allí compró un celular nuevo para cambiar la forma de comunicación con los delincuentes. La nueva orden era desconcertante: debía viajar a la ciudad de Santo Tomé, dónde dejó los elementos de valor en una esquina, la cual no recuerda el nombre de ninguna de las calles. Tras ello, volvió a Rosario.

Recién a su regreso, empieza a intervenir la policía, luego de que la dueña de la casa encuentre la escena del faltante de dinero cerca de las 17 horas. Desde entonces, la Agencia de Investigación Criminal inició con las investigaciones.

Por su parte, la joven Rocío dijo encontrarse con buen estado de salud física y mental, destacando que nunca tuvo contacto visual con los delincuentes.