Stephen O’Loughlin, de 49 años, fue encontrado muerto el pasado miércoles junto a su hijos Pierce, de nueve años
Stephen O’Loughlin, de 49 años, fue encontrado muerto el pasado miércoles con una herida de bala dentro de su apartamento en la calle 3800 de Scott Street en el distrito Marina de San Francisco, junto a él estaba su hijo Pierce, de nueve años, quien también había fallecido. Ahora se sabe que pudo haberlo asesinado por una disputa sobre vacunas.
O’Loughlin se desempeñaba como vicepresidente de una firma de inversiones, y fue descrito como un anti vacunas con enfermedad psiquiátricas, presuntamente habría matado a su hijo y luego a sí mismo la semana pasada en medio de una batalla legal por la custodia del niño y discusiones con su ex esposa sobre las vacunas y atención médica.
El detonante para la fatal decisión serían las vacunas, ya que el padre había dado su consentimiento para inmunizar a Pierce el martes, un día antes de su muerte. Previamente se había programado un juicio sobre la batalla por su custodia en marzo, informó el San Francisco Chronicle.
Según los registros judiciales de septiembre pasado, Lesley Hu, ex esposa de O’Loughlin y madre de Pierce, había descrito que su ex pareja y padre de su hijo se había unido a un “grupo de autoayuda de la nueva era” en 2012 y se había convencido de que el gobierno buscaría usar el control mental en los estadounidenses.
Su ex esposa, Lesley Hu, había sido ascendida recientemente a vicepresidenta ejecutiva de una empresa proveedora de contenedores donde ha trabajado durante más de 15 años.
O’Loughlin y Hu habían estado involucrados en una amarga batalla por la custodia que giraba en torno a la atención médica de su hijo.
El día del crimen, la madre llamó a la policía después de enterarse de que su hijo no se había presentado a clases en Convent & Stuart Hall, la escuela católica donde asistía Pierce y por la cual pagaban $ 35,000 al año.