El fiscal que investiga el crimen de Fernando Pastorizzo, por el que está detenida su ex novia Nahir Galarza en la ciudad entrerriana de Gualeguaychú, informó hoy que la Nochebuena pasada, cinco días antes del homicidio, hubo una pelea a golpes entre ambos jóvenes en la puerta de una discoteca.
«Hubo un problema entre ellos en Navidad y la fiscalia ha acreditado que ese día el fallecido y ella estuvieron juntos el 24 a la noche», explicó a la prensa en fiscal de la causa, Sergio Rondoni Caffa.
«Hubo un problema entre ellos, una discusión que se dio fuera de una discoteca y una pelea a golpes», añadió.
Rondoni Caffa explicó que, según declaraciones de testigos, «ella le pegó a él, pero también él le había pegado en la cabeza a ella, había una situación de violencia de ambas partes».
De este modo, el representante del Ministerio Público confirmó rumores sobre visos de violencia en la relación entre ambos jóvenes.
El fiscal consideró que «tiene que haber alguna explicación para que se volvieran a ver» cinco días después, el 29 de diciembre, cuando ocurrió el crimen, y espera obtener esa información a partir de los teléfonos celulares de ambos, que ya fueron secuestrados en el marco de la causa y son sometidos a peritajes.
Explicó que por el momento Galarza (19) está imputada por el «homicidio doblemente agravado por el uso de arma de fuego y por el vínculo» de la víctima, de 20 años.
Pero aclaró que aún necesita determinar de forma fehaciente el vínculo que había entre ellos, ya que la chica, al confesar el crimen, «manifestó que cada uno hacía lo que quería» y que «habían sido novios, dejaron de serlo pero de vez en cuando se veían».
El fiscal adelantó que en la revisión de los teléfonos y otros dispositivos electrónicos secuestrados se buscará información de mensajes por WhatsApp, Facebook e Instagram que permita aportar datos al expediente judicial.
«Si él (por Pastorizzo) sufría alguna cuestión de violencia, se lo habrá dicho a los amigos», estimó.
También señaló que «está en análisis una imputación por alevosía», es decir, en caso de que que se compruebe que la víctima estaba en un estado de indefensión al momento del crimen, lo cual «no se acreditó» aunque «no significa que no haya existido».
«Por lo que existe en el legajo, ella referenció que en el lugar del hecho le efectuó los disparos mientras iba con él en la moto», precisó Rondini Caffa, aunque aclaró que aún falta que la detenida aporte detalles sobre el episodio.
Al respecto, dijo dijo que según los peritajes planimétricos realizados en el lugar y sobre la moto de la víctima, las huellas del rodado indican que en un determinado momento el vehículo se tambalea y cae.
Por eso, entiende que «estaban los dos arriba de la moto por una calle de tierra, ahí se efectúa el primer disparo y durante la caída se debería haber producido el segundo».
Sin embargo, aclaró que para determinar si existió ese agravante, «hay que ver cuál es el disparo que verdaderamente lo mató», para lo cual aguarda los resultados finales de la autopsia.
Ayer, el juez de Garantías de Gualeguaychí, Guillermo Biré, dictó la prisión preventiva por 60 días de Galarza, al considerar que hay elementos para imputarle “homicidio doblemente agravado», delito que prevé en un futuro juicio oral la pena de prisión perpetua.
Al escuchar cómo sucedieron los hechos, la joven «lloró en varias oportunidades, se mostró compungida y aceptó un vaso de agua», contó el fiscal, que también relató que ella dijo que había comprendido el delito del que se la acusa.
Otra medida que se adoptó el magistrado es que la chica permanezca por al menos un mes en la comisaría del Menor y la Mujer y que no tenga acceso a redes sociales porque podría entorpecer la investigación al contactarse con testigos.
La prisión preventiva de Galarza se dictó a pocas horas de que fuera dada de alta del área de psiquiatría del Hospital Centenario de Gualeguaychú, donde permanecía internada desde el día del hecho y fuera llevada a la dependencia policial.
En declaraciones radiales realizadas esta mañana, Brie dijo que «es un hecho aberrante, el más grave que está tipificado penalmente. ya que está penado con prisión perpetua y esta circunstancia incide directamente en el riesgo de fuga», hecho por el cual dictó la medida de prisión preventiva.
No obstante, aclaró que «el hecho de que Galarza se haya presentado espontáneamente ante la Fiscalía, es una circunstancia que le va a ser de utilidad cuando se celebre el juicio oral, es decir que eso deberá ser evaluado por el Tribunal de Sentencia».
El hecho ocurrió el viernes alrededor de las 5 de la madrugada, cuando Pastorizzo fue muerto a balazos en la calle General Paz al 300, al lado de su motocicleta y con dos disparos en el pecho.
Un remisero que pasaba por el lugar vio al joven y a otra persona que no pudo identificar, pero al dejar a su pasajero y regresar, sólo halló al muchacho agonizando y dos cascos a su lado.
Debido a que la ambulancia tardó alrededor de media hora, Pastorizzo finalmente murió en el lugar.