La Asociación Civil Siembra y Cosecha, en conjunto con la ONG Human Hands, impulsa una campaña ecológica y con salida laboral. donde recolectan plástico para armar accesorios. CLG habló con Liliana, referente de la Asociación
La Asociación Civil Siembra y Cosecha, ubicada en el centro de Villa Banana, hace años que trabaja con la comunidad del barrio para transformar y educar a cada vecino. Se destaca por sus proyectos socio-educativos y son innumerables las propuestas que apuntan tanto a los chicos como a los grandes. No obstante, el último programa le agrega conciencia ambiental con el objetivo de reducir el plástico que se multiplica en la zona. CLG dialogó con Liliana Sánchez, presidenta de la asociación, que contó los detalles de la campaña: “Es una iniciativa ecológica que al mismo tiempo es una salida laboral”, señaló en sus primeras palabras.
Es que con el plástico recolectado de bolsas de nailon, Siembra y Cosecha hace carteras y mochilas que luego son comercializadas por la propia asociación y Human Hands, la sede local de la ONG internacional que también participa del proyecto.
Para comprar el producto o donar bolsas se pueden acercar a las sede de Siembra y Cosecha en Río de Janeiro 2645 o bien a Human Hands Rosario en Oroño 3573. También se puede llamar al 3142000058 o 3425299617. La iniciativa también contempla la entrega de tres bolsas de nylon y desde las instituciones entregan un alimento no perecedero.
La inquietud de Siembra y Cosecha nació por el gran basural que tiene el barrio en bulevar 27 de Febrero y Río de Janeiro. Cada vez que el viento crecía se desprendían grandes cantidades de bolsa que terminaban en las casas de los vecinos. ”Era un desastre”, resumió Liliana.
Así comenzaron a trabajar “casa por casa” y entregando material para concientizar para contar la idea y “pedirle que nos den una mano para enseñarle a los chicos que estamos contaminando el medio ambiente y también que podemos evitarlo convirtiendo todo en cosas útiles como carteras y mochilas”, afirmó Sánchez y agregó: “Si los padres toman el hábito, los niños aprenden”.
Todo se inició hace algo más de 45 días, con reuniones entre los vecinos y una tarea que la referente Siembra y Cosecha detalló que “no fue fácil”, pero de a poco “se pudo lograr”. El real problema que identificó Liliana fue que ”no mucha gente tiene conciencia de todo lo que hace una bolsita al medio ambiente, ni tampoco todo lo que se puede hacer con ella y lo bien que se hace reciclando”.
En más de un mes y medio de trabajo ya confeccionaron 40 mochilas. La tarea está a cargo de un grupo de mamás del barrio y la gente de Human Hands, y los primeros accesorios -confió Sánchez- “son más fuerte que las de tela, resisten al agua y tienen un cargador solar para el celular, que ya viene incorporado”. Con regocijo, la mujer aseguró “nadie se puede resistir”.
En cuanto a la punta laboral, la referente de Siembra y Cosecha manifestó que “cada mamá puede hacer el diseño que quiera, hemos descubierto que aparte de relajarse es algo que les encanta”.
Por último, sostuvo que la campaña busca que el barrio “tome conciencia” y aseguró que en el tiempo que llevan trabajando “se ve el cambio rápidamente y cada vez recibimos más y más bolsas”.