Policiales

Condenan a padre e hijo por estafas con autos y alquileres en Santa Fe


En el juicio, el Ministerio Público de la Acusación (MPA) planteó que “producto de las estafas, entre agosto de 2017 y junio del año pasado, Sebastián Frutos se apoderó de 1.921.195 pesos y de cuatro automóviles”

Un hombre fue condenado tres años de prisión de cumplimiento efectivo por estafar al menos a 10 personas tras simular ser parte de una empresa constructora y una inmobiliaria en Santa Fe, en tanto su padre recibió una pena de cumplimiento condicional por cooperar con él en las maniobras defraudatorias, informaron este lunes voceros judiciales.

Se trata de Sebastián Ignacio Jesús Frutos, quien además engañó a una empresa financiera y obtuvo un crédito a nombre de otra persona, en tanto a su padre, identificado como Félix Ignacio Frutos, se le impuso una pena de un año y medio de prisión de cumplimiento condicional.

Las condenas fueron dictadas por el juez Gustavo Urdiales en un juicio abreviado celebrado en los tribunales de la capital provincial en el que Sebastián Frutos fue sancionado por estafa en calidad de autor y su padre por el mismo delito pero como partícipe necesario.

En el juicio, el Ministerio Público de la Acusación (MPA) planteó que “producto de las estafas, entre agosto de 2017 y junio del año pasado, Sebastián Frutos se apoderó de 1.921.195 pesos y de cuatro automóviles”.

“En seis oportunidades, fingió ser directivo de una empresa constructora y suscribió contratos de locación con personas que no pudieron acceder a los inmuebles que supuestamente les había alquilado”, sostuvo la Fiscalía.

Además, “por lo menos cinco veces, Sebastián Frutos se hizo pasar por representante de una agencia de venta de autos y recibió dinero a cambio de automóviles financiados que los compradores nunca recibieron”.

En cuanto al padre, el MPA indicó que “Félix Frutos tenía un cargo jerárquico en la Asociación Mutual del Obrero Municipal (AMOM) de San Justo y, para procurar el éxito de las estafas, en diferentes ocasiones puso a disposición de su hijo inmuebles que poseía o alquilaba esa institución”.

Además, Sebastián Frutos se comunicó en junio del año pasado con financiera, simuló ser otro hombre y, mediante el engaño, requirió y obtuvo un crédito personal por 40.000 pesos”.