Desde el 10 de febrero y hasta el 6 de abril, más de 110 comercios ofrecerán una canasta de 125 artículos a precios congelados. Será la novena edición
Desde el 10 de febrero y hasta el 6 de abril, más de 110 comercios ofrecerán una canasta de 125 artículos a precios congelados. Será la novena edición
Desde el 10 de febrero y hasta el 6 de abril entra en vigencia la novena etapa de Precios Justos, el programa desarrollado en conjunto por la Municipalidad de Rosario y almaceneros y proveedores locales que busca acercar a los ciudadanos una propuesta de productos de consumo cotidiano a precios convenientes.
Más de 110 comercios ubicados en diferentes barrios ofrecerán una canasta de 125 productos a valores congelados. Las etapas previas habían tenido una extensión de 45 días, mientras que ésta será de 60, buscando abarcar el comienzo del ciclo lectivo.
Precios Justos no va en detrimento de programas o políticas de la misma índole llevadas adelante por el gobierno nacional, como Precios Cuidados o la flamante Tarjeta Alimentar, sino que buscan complementarse y potenciarse. Es por eso que 33 comercios de la red de Precios Justos van a ofrecer un 10% de descuento adicional en los productos seleccionados para quienes compren con la Tarjeta Alimentar.
Es importante recordar que Precios Justos también ofrece el beneficio del 20% de descuento los días miércoles con las tarjetas de crédito del Banco Municipal en los almacenes adheridos.
Para su novena etapa, el programa suma variedades de productos sin TACC e incorpora por primera vez en su lista artículos de gestión menstrual como toallitas y protectores diarios. Esto surge de un trabajo en común de las áreas que llevan adelante Precios Justos con la Secretaría de Género y Derechos Humanos de la Municipalidad.
El programa Precios Justos surgió de un amplio acuerdo alcanzado por la Municipalidad de Rosario, el Centro Unión Almaceneros y Autoservicistas de Rosario, empresas productoras locales y de la región, emprendedores sociales y empresas recuperadas, con el objetivo de, por un lado, ofrecer a los consumidores productos a precios justos y, por otro, permitir a los comerciantes mantener, y hasta incrementar, las ventas de los comercios y empresas participantes.