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Con más de mil muertos y 25 mil contagios, Portugal levanta el estado de emergencia


Desde el gobierno informaron que se pasará a un "estado de calamidad", bajo el cual se realizará desde el lunes una apertura progresiva de pequeños comercios

Portugal concluirá esta medianoche su estado de emergencia iniciado el 19 de marzo, con un balance que asciende a 1.023 fallecidos y 25.190 contagiados por coronavirus, datos que les permiten encarar con optimismo la desescalada que comienza el lunes, aunque las autoridades advirtieron que el riesgo no ha desaparecido.

Comparado con este viernes, se han registrado en las últimas 24 horas 16 muertes más y 203 nuevos contagiados, hasta llegar a un número total de 25.190 casos.

Son menos casos que los reportados el viernes (25.351) porque hubo una «duplicación de datos» en la región Norte, una situación que ya ocurrió al menos en otra ocasión desde que comenzó el estado de emergencia el pasado 19 de marzo.

Con estos números, el país vive hoy su último día del estado de emergencia, que dará paso a partir de esta medianoche al «estado de calamidad», bajo el cual se realizará desde el lunes una apertura progresiva de pequeños comercios, peluquerías, barberías y concesionarios.

Esta nueva etapa provocará un aumento de contacto entre las personas, por lo que «la probabilidad y el riesgo (de contagio) serán mayores» advirtió durante la conferencia de prensa que se realiza diariamente la titular de la Dirección General de Salud, Graça Freitas, informó la agencia de noticias EFE.

Durante la exposición, estaba también la ministra de Salud, Marta Temido, a quien los periodistas le consultaron sobre el acto del 1 de mayo que organizó la Confederación General de Trabajadores de Portugal (CGTP), que reunió a unas 800 personas convocadas ayer en Lisboa y que provocó una polémica en el país.

Para la ministra, Portugal fue un buen ejemplo y las celebraciones del 1 de mayo transcurrieron «de forma organizada y pacífica» y destacó que «en otros países» hubo incluso enfrentamientos con agentes de seguridad durante las celebraciones del Día del Trabajador.

Al margen de esta cuestión, el gobierno luso anticipó que dará apoyos de hasta 5.000 euros a pequeñas y microempresas para que puedan realizar las «inversiones» necesarias para reabrir con medidas de seguridad.